Detrás de cada maleta hay una historia que no alcanzó a despedirse. Una fotografía, una bufanda, un amuleto o una carta pueden convertirse en testigos silenciosos del exilio. Esta galería virtual recoge objetos significativos que han acompañado a personas refugiadas, exiliadas y solicitantes de asilo en sus tránsitos forzados. Son huellas materiales de memorias vivas: objetos que abrigan el desarraigo, la resistencia, el arraigo y la reconstrucción.
Desde el Centro Nacional de Memoria Histórica, y en consonancia con nuestro mandato de reconocer la pluralidad de voces y experiencias del conflicto armado, hacemos memoria también con y desde la Colombia fuera de Colombia. Esta galería es una forma de honrar la dignidad de quienes se vieron forzados a huir, y de visibilizar sus aportes, luchas y resistencias desde el exilio, el refugio o el retorno.
Con esta acción conmemorativa, nos unimos al Día Internacional de las Personas Refugiadas para escuchar lo que los objetos cuentan cuando las palabras no alcanzan. Cada imagen y cada relato aquí compartido es una ventana a las violencias que expulsan, pero también a las formas de vida que emergen y se sostienen más allá de las fronteras.