Noticia

Autor

CNMH

Fotografía

Laura Cerón

Publicado

07 Jun 2016

Así suena el monumento de los niños y niñas

El 31 de mayo se presentó el segundo concierto del Monumento Sonoro por la Memoria. 50 niños y niñas de Bogotá levantaron sus voces en contra del conflicto armado y la indiferencia.


Para Carmen Rosa Dagua, líder tradicional Nasa del Resguardo de Jambaló, las historias de los niños y niñas generan las más profundas reflexiones en los adultos que las escuchan. Ella lo sabe de primera mano pues los niños y niñas de esta comunidad, en el Norte del Cauca, participaron hace tres años en la construcción del Monumento Sonoro por la Memoria, “La historia de los Colibríes y las Langostas”. Sus voces entonaron fábulas que expresaban el rechazo a la guerra y los sueños de vivir en una comunidad en paz.

El 31 de mayo estas mismas canciones fueron puestas en escena por 50 estudiantes de dos colegios de Bogotá. Muchos de ellos nunca han escuchado retumbar balas ni explosivos. Entre sus miedos no está terminar siendo utilizados por los actores de la guerra. Y, sin embargo, por medio de las canciones que aprendieron, en las que una tierra de colibríes se ve corrompida por la presencia de langostas que buscan hacerle daño a la comunidad, comprendieron la realidad de miles de niños y niñas en todo el país.

El Centro Nacional de Memoria  Histórica desarrolló, en 2013, un proyecto denominado Las Voces de los Niños, Niñas y Adolescentes: Ecos para la reparación integral y la Inclusión Social. La investigación se llevó a cabo con niños, niñas y jóvenes en varias regiones del país y, producto de este trabajo, se gestó el repertorio de canciones que conformaron “La historia de los Colibríes y las Langostas”.

  •  

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

    En fotografía: Adrián Augusto Mezcal y Jeremías Quebrada.

  •  

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

     

    En fotografía: Sandra Montero. 


    Adrián Augusto Mestizo fue uno de los protagonistas del primer concierto en el que se presentó el Monumento Sonoro por la Memoria. Vive en el Resguardo de Jambaló y hace parte de la Guardia Indígena. Su canción favorita se llama José el Colibrí, que habla del rechazo al reclutamiento forzado de niños y niñas por parte de grupos armados. Él, a sus 12 años, tiene claro que, como miembro de la guardia, su deber es hacer lo posible por proteger a su comunidad de forma pacífica. Descubrió que las canciones y la memoria son una buena herramienta para hacerlo.

     

     

     

     

    José no quería un fusil, lo que quería era una guitarra.

    Y cuando venían por él, él les contestaba así:

    Tengo las manos ocupadas, no puedo cargar un fusil.

    Estoy cantando canciones, no quiero ir a la guerra a morir.

     

    El 31 de mayo, en el segundo concierto del Monumento sonoro, al que fueron invitados algunos integrantes de la comunidad de Jambaló, Adrián conoció a Sandra Montero, que tiene 13 años y quiere ser cantante; tiene una gran voz. Ella no ha vivido la guerra de cerca, y, sin embargo, las canciones que compusieron niños y niñas en otras partes de Colombia la acercaron a una realidad que, aunque es lejana no debe ser indiferente para ella. “Hay que comprender al país porque nosotros podemos estar en esas situaciones en cualquier momento”, dice. Su canción favorita se llama “Territorio de paz”

     

     

    Por eso yo te invito a que cantes conmigo.

    Por eso yo te invito a jugar.

    La guerra no es un juego de niños y niñas.

    Somos territorio de paz.

     

    A esta acción de memoria se han ido sumando diferentes socios a lo largo de los años. En 2015 se realizó un convenio con la Caja de Compensación Familiar Compensar. Además se sumaron los esfuerzos de OIM y USAID. Allí se vio el poder que tiene la memoria viva, la memoria que es expresada por medio de la música. El concierto fue un espacio de encuentro para que estos niños, que tienen en sus manos el futuro del país, le enseñaran a los asistentes que la guerra es un asunto muy serio y que nos compete a todos, sin importar si nacimos en Bogotá, en el Cauca, o en cualquier parte de Colombia.

    Escucha todas las canciones aquí:

     

     

    Publicado en Noticias CNMH