Desde el archivo del familiar de un líder social desaparecido, pasando por el de un medio de comunicación que ha registrado la guerra, o el de una ONG que busca cooperar en la paz del país. Todos estos archivos, junto a los que se encuentran bajo la responsabilidad del Estado, son fundamentales para reconstruir la memoria histórica del conflicto armado en Colombia, y por eso el Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) quiere saber dónde están, en qué condiciones se encuentran y a qué peligros se enfrentan, para promover su protección.
Para esto, la Dirección de Archivo de los Derechos Humanos del CNMH empezó en el 2015 a implementar el Registro Especial de archivos de Derechos Humanos, READH. Esta labor se realizará inicialmente en 7 departamentos: Antioquia, Santander, Tolima, Magdalena, Córdoba, Nariño, Sucre y en Bogotá. En cada uno de estos lugares, un grupo multidisciplinario se encuentra visitando a líderes, víctimas del conflicto armado, organizaciones sociales y diferentes tipos de entidades, cuyo archivo testimonie graves violaciones a los derechos humanos, infracciones al Derecho Internacional Humanitario, y demás hechos relativos al conflicto armado colombiano de interés para la memoria histórica.
Esta tarea fue encargada al CNMH en el Decreto reglamentario 4800 de 2011 [Consulta la legislación del READH], pero no es nada fácil, si se tiene en cuenta el amplio espectro de archivos que podrían hacer parte de este Registro. Este debe incluir, por ejemplo, archivos que puedan ayudar a satisfacer las demandas de justicia y reparación de las víctimas, a reconstruir un fragmento de vida o la dignidad de una persona que ha sido sujeto de estigmatización y violencia, o a identificar los modus operadi de los victimarios.