El Centro Nacional de Memoria Histórica aportó al fortalecimiento de la memoria histórica en Samaná
El Centro Nacional de Memoria Histórica realizó su segunda asistencia técnica y el cierre del acompañamiento territorial a la Fundación para el Desarrollo Comunitario de Samaná, un proceso orientado a la construcción de memoria histórica.
El Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) y la Fundación para el Desarrollo Comunitario de Samaná (Fundecos) articularon un trabajo conjunto orientado a la búsqueda de la verdad, la dignificación de las víctimas del conflicto armado y el fortalecimiento de capacidades comunitarias para la construcción de memoria. Con la segunda asistencia técnica a la organización, en este municipio del departamento de Caldas, se consolidó el proceso de acompañamiento contemplado en el Plan Territorial de Memoria del Eje Cafetero.
El encuentro —que marcó el cierre del acompañamiento técnico y metodológico con Fundecos— fue un espacio participativo en el que confluyeron familias buscadoras del Magdalena caldense, liderazgos comunitarios y representantes de organizaciones sociales. Un conversatorio y diversos actos simbólicos dieron paso a una reflexión sobre las resistencias frente al conflicto armado, la importancia de reconstruir la historia desde los territorios y la necesidad de garantizar la no repetición de la violencia.
La segunda asistencia técnica por parte del CNMH no solo brindó herramientas para fortalecer las capacidades locales en torno a la memoria, sino que también reafirmó el papel fundamental de las comunidades en los procesos de verdad, justicia y reparación. Este tipo de ejercicios metodológicos permiten reconocer el dolor, pero también las resistencias, las luchas y los anhelos de paz que siguen vivos en los territorios.
«Este es un reconocimiento de las familias que no han desistido y siguen luchando, a pesar de todo. Esto no es un proceso fácil, pero no podemos dejar de insistir como el sirirí», señaló durante el diálogo Jorge Eliécer Echeverry, integrante de la organización Renacer. «Cuando logramos algo, volvemos y nos motivamos y nos llenamos de fortaleza para continuar. No hay derecho a que nos opaquen y tampoco que nos digan que no hay búsqueda», agregó Lorena Echeverry, representante legal de Fundecos.
El municipio de Samaná, en el oriente de Caldas, ha sido uno de los territorios más golpeados por el conflicto armado en el departamento. Por su ubicación estratégica, que abarca la cuenca del río La Miel y la serranía de Samaná, fue un corredor disputado por distintos actores armados ilegales, principalmente las FARC-EP, el ELN y grupos paramilitares. Durante las décadas de 1990 y 2000, los habitantes del municipio sufrieron la afectación de masacres, asesinatos selectivos, reclutamiento forzado, desplazamientos masivos y desapariciones forzadas, hechos que dejaron profundas heridas en el tejido social.
Con esta jornada se fortaleció el vínculo entre el CNMH, Fundecos y las comunidades del oriente caldense, que continúan avanzando en la reconstrucción de su historia y en la exigencia de verdad y reparación. Con su presencia en el territorio, la entidad refrenda su compromiso de acompañar de manera decidida a las comunidades en sus apuestas por la verdad y la memoria.