Historia de un oso no es un cuento de hadas

Autor

Maria de los Ángeles Reyes

Fotografía

CNMH

Publicado

04 Mar 2016

Historia de un oso no es un cuento de hadas

En la entrega número 88 de la estatuilla del Oscar, Chile estuvo de celebración por el reconocimiento que recibió el corto animado “Historia de un oso”, una metáfora del exilio.


La producción gira alrededor del relato de un oso solitario, que vive de mostrar la historia de su pasado dentro de un pequeño diorama que él mismo fabrica. Allí, dentro del diorama, es cuando emerge la tragedia. La historia del oso no es un cuento de hadas. Fue obligado hacer parte de un circo y separado a la fuerza de su esposa y su pequeño hijo.

Aunque dentro de la historia que el viejo oso fabrica el final es feliz y vuelve a encontrarse con su familia, el cortometraje deja abierta la puerta de la duda. El aire de nostalgia que inunda toda la puesta en escena hace pensar que el buen desenlace dentro del diorama es un anhelo que no se hizo realidad.

Ese mismo anhelo, el de volver a su hogar, es el que tenía el abuelo del director del cortometraje, Gabriel Osorio, uno de los 200.000 exiliados chilenos, durante la dictadura de Augusto Pinochet. Ese es el mismo anhelo de cientos de exiliados de Suramérica que salieron por causa de las dictaduras militares de los 70. Es el anhelo de más de doscientos mil colombianos que han tenido que refugiarse de las diferentes formas de violencia que padece Colombia desde hace más 50 años. 

La historia de un oso, según su director, buscaba contar una de las realidades más crudas de su país, de una forma no literal y lo más original posible. El aire tranquilo y apacible con el que se narra la historia es un reflejo muy vivo de lo que significa estar exiliado. A pesar de que muchos ven la oportunidad de salir del país como algo positivo, las personas que han sufrido esta situación dicen que la realidad es muy diferente: “la vida cambia radicalmente; dejamos todo, familia extensa, amistades, vivienda y todo lo que teníamos, mi vida deportiva se terminó” dice Gustavo Guzmán, una persona que compartió su testimonio con el Centro Nacional de Memoria Histórica.

Historia de un oso, sin ser el favorito, le ganó la batalla a cortos de productoras tan grandes como Estudios Pixar y deja muy en alto el nombre de las producciones latinoamericanas. Sobre todo pone en la esfera pública temas de interés para Latinoamérica y que apenas están empezando a ser visibles en escenarios internacionales como La Academia. Esto mismo lo resaltó Gabriel Osorio en una entrevista para para BBC Mundo: “aunque para nosotros las historias que tenemos para contar pueden no ser nuevas, a ellos les parecen refrescantes. Y eso nos abre las puertas”.

Los invitamos a conocer es especial multimedia:
Las Voces del Exilio.

Testimonios de exiliados, infografías, mapa, artículos, calendario, documentos de interés, etc.

Historia de un Oso (Bear Story). TRAILER

">

Publicado en Cine + memoria