¿Cómo se vinculan las Iniciativas de memoria histórica a la construcción de paz en Colombia?
"En las diferentes regiones del país, la elaboración de hechos victimizantes y la expresión de memoria necesariamente pasa por alcanzar los derechos que fueron arrebatados, y que le son inherentes a las comunidades y organizaciones, y en ese sentido la expresión de la memoria se opone a la continuidad del conflicto: la memoria exige que haya democracia, que haya verdad, que haya reparación. De ahí que cada iniciativa de memoria esté relacionada a las necesidades específicas de cada territorio, y en ese sentido, que sean apuestas para la construcción de paz territorial, frente a las amenazas que el conflicto y la violencia puedan generar".
¿Cómo apoya el Centro Nacional de Memoria Histórica a las iniciativas de memoria?
"El Centro Nacional de Memoria Histórica ha asumido la misión de apoyarlas. Eso está reconocido y soportado jurídicamente tanto en la Ley de Víctimas como en el decreto regulatorio del CNMH, y así lo ha venido haciendo el Centro a lo largo de su existencia. El apoyo del CNMH se venía dando de acuerdo con las demandas de las iniciativas, pero en el último año hemos llegado a la conclusión de que es necesario que haya un grupo dedicado exclusivamente a brindar ese apoyo, que integre esas diferentes perspectivas, porque las iniciativas de memoria son integrales, multidisciplinarias, interexpresivas, si se quiere. Así que la creación del grupo de Apoyo a Iniciativas y Acciones de Memoria Histórica tiene que ver con un proceso de organización interna del Centro para dar un salto en ese apoyo a las iniciativas de memoria".
¿Cuáles son las principales apuestas del grupo para 2016?
"Este año tenemos varias apuestas estratégicas: la primera es poder tener presencia en más territorios de la que habíamos tenido antes, a través de convenios subregiones para apoyar y acompañar diversas iniciativas de memoria. En segundo lugar, nos interesa posicionar el apoyo social a las iniciativas de memoria, eso significa comprender que el apoyo no se agota en acompañarla y ayudarla económicamente para que se generen productos, sino también intentar vincular diferentes alianzas y procesos para que los resultados puedan apropiarse socialmente, difundirse, y ser transformadores de realidades. En tercer lugar nos interesa trabajar fuertemente componentes que están en deuda en estos momentos, procesos que tienen que terminar de desarrollarse, como la red virtual de iniciativas de memoria, que viene trabajándose hace bastante tiempo y que necesitamos que entre en funcionamiento y se consolide".
¿Qué ocurrirá con las IMH una vez firmados los acuerdos de paz?
"Es muy importante que se comprenda que las iniciativas de memoria no son simplemente ejercicios temporales, sino que son sobre todo procesos de organización y reorganización social que van a ser muy fundamentales a la hora de construir paz en los territorios basados en la experiencia, en las lecciones que nos han dejado tantas historia de violencia y de violaciones a los derechos humanos. Así que el primer reto de muchas iniciativas es y será básicamente su consolidación.
Existir, para lo cual nosotros trabajamos, pero el reto más especial tiene que ver con cómo las iniciativas ganan autonomía y sostenibilidad, dos elementos que son interdependientes. Hay iniciativas que depende de la voluntad de los gobiernos de turno o de la cooperación internacional, sin que haya existido una política que les genere esa sostenibilidad. Esperamos aportar elementos a la discusión sobre la política de sostenibilidad de la memoria, que se abrirá con la firma de los acuerdos de paz".
Ver proyectos destacados del trabajo del CNMH con Iniciativas de Memoria.