25 líderes sociales y de víctimas del país iniciaron una formación virtual para proteger, conformar e incidir con sus archivos en los mecanismos creados con los Acuerdos de Paz.
El Gobierno de Canadá, el Programa de Justicia Transicional del Pnud y la Dirección de Archivo de DDHH del Centro Nacional de Memoria Histórica se unieron para crear: ‘Formación Virtual en Protección, Conformación, Acceso y Uso Social de Archivos de Derechos Humanos y Memoria Histórica’, un espacio de aprendizaje que responda a las necesidades de las organizaciones sociales y de víctimas para incidir y contribuir a los mecanismos transicionales de los Acuerdos de Paz, como la Comisión de Esclarecimiento de la Verdad, la Jurisdicción Especial de Paz y la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas.
Para Ana Margoth Guerrero, directora de la Dirección de Archivo de DDHH, este espacio permitirá difundir “a una mayor cantidad de organizaciones el manejo de los archivos y la incidencia que pueden tener en los mecanismos”, y en ese sentido son ellas quienes identificarán la aplicación de la Política Pública de Archivos de Derechos Humanos, Memoria Histórica y Conflicto armado.
Por eso, para ayudar a responder a la pregunta sobre cómo incidir con los archivos, con los que han registrado las violaciones a los derechos humanos y las infracciones al DIH durante el conflicto armado, se invitaron a 25 representantes de organizaciones sociales y de víctimas de todo el país para que conozcan, durante siete semanas, cómo proteger, conformar, usar sus archivos e incidir con ellos en los mecanismos.
Los líderes se reunieron en Bogotá el 7 y 8 de mayo para conocer las unidades y la metodología de la formación. El 9 de mayo iniciaron la primera unidad –Protección de Archivos de Derechos Humanos y Memoria Histórica-. Cinco organizaciones acompañarán el proceso formativo y cuatro expertos, nacionales e internacionales, serán conferencistas.
Para William Wilches, director del Museo Caquetá y uno de los participantes del curso “significa tener herramientas para hacer el trabajo, para involucrar a la comunidad, para organizar los archivos”.
Con este proceso se empoderarán las organizaciones con la política pública, para que reconozcan la importancia de sus archivos y fortalezcan sus capacidades para participar e incidir desde su legado documental y testimonial.
Publicado en Noticias CNMH