Los archivos en los procesos de justicia transicional
Lisa Ott y Elizabeth Baumgartner son las co-cordinadoras del programa ‘Dealing with the Past’, de la Fundación Suiza para la Paz, SwissPeace, que recientemente, junto a la Dirección de Archivo de los Derechos Humanos desarrollaron el proyecto "Mapeo de archivos de la Fiscalía General de la Nación en Colombia con perspectiva al trabajo de los mecanismos de justicia transicional", en el marco del convenio firmado entre la Fiscalía y el Centro Nacional de Memoria Histórica.
Ellas hablaron con el CNMH acerca de los retos que tiene el país, en materia de archivos de derechos humanos, ante al proceso de justicia transicional que Colombia que está enfrentando.
CNMH: Con base a sus experiencias internacionales ¿Qué desafíos tiene Colombia para que los archivos de derechos humanos puedan aportar efectivamente al proceso de paz?
Lisa Ott: No hay duda de que será difícil recolectar 50 años de conflicto, un conflicto que además ha sido relativamente bien documentado por una gran cantidad de instituciones públicas. Esto es un desafío en sí mismo. Además, como lo ha señalado la sociedad civil y el Alto Comisionado de Derechos Humanos, se ha reportado que documentos importantes han sido o están siendo destruidos por actores que no quieren que muchas violaciones de derechos humanos salgan a la luz. También, al ser un conflicto tan prolongado, existe documentación muy antigua que está en riesgo, por estar en zonas de condiciones ambientales difíciles, donde es poco probable que el papel sobreviva.
Elizabeth Baumgartner: Muchas veces no se piensa en la utilidad de establecer un sistema de recolección de información desde el inicio del proceso, o bien de tener bases de datos que permitan la extracción de la información relevante entre toda la masa de información que existe. Esto es un problema al que la mayoría de los mecanismos se enfrentan. Se necesita planeación desde el inicio de la creación de cada mecanismo, no hasta el final del proceso.
CNMH: Colombia recientemente conoció el Decreto de creación de la Comisión de Esclarecimiento. En su criterio ¿Cómo lo ven en materia de archivos de derechos humanos?
E.B: Uno de los desafíos para la Comisión es la cuestión de la preservación, previsto en el artículo 16 del Decreto, con respeto al acceso de información reservada. Nos parece problemático porque las experiencias con otros contextos es que se establece rápidamente que todo es reservado, sin hacer la reflexión necesaria de qué debe serlo realmente. Además, hemos leído la base legal del decreto de la Comisión, y realmente no hay mucho sobre archivos. En la mayoría de los casos donde al final del mandato de las comisiones el futuro de los archivos no es muy claro, estos quedan prácticamente abandonados.
L.O: Además, muchas veces hay una gran cantidad de trámites que hace que sea más difícil acceder a la información, haciendo el proceso excesivamente lento. Así que dejar a criterio de la institución la calidad de reserva de un archivo es un riesgo muy grande que, además, perpetúa ciertos problemas como la burocracia alrededor de la justicia transicional.
CNMH: Retomando experiencias internacionales, ¿Qué errores se deben evitar en este proceso en materia de archivos de derechos humanos?
E.B: Lo más importante es planear los archivos y comprender cuál es la importancia que tienen. Hemos visto en otros contextos que las organizaciones de la sociedad civil, por ejemplo, tienen una misión muy clara, pero olvidan que todos los documentos necesitan protección a largo plazo. Muchas veces las organizaciones no ven la importancia de sus archivos en un proceso de justicia transicional y los destruyen. Generalmente son los errores más comunes, la falta de recursos y la falta de conocimiento de cómo tratar y archivar esos documentos.
L.O: El tema de recursos aplica para la sociedad civil pero también para entidades del Estado y para los mismos órganos de justicia transicional, porque hay que tener muy claro qué va a pasar con la documentación y cómo se va a mantener. Además de esto, no toda la información importante sobre violaciones de derechos humanos se encuentra en casos de crímenes, sino muchas veces también en documentación administrativa de las entidades. Un ejemplo es que a través de recibos de pago del servicio de lavandería, se pudo deducir cuántos presos estaban en una prisión chilena, y se descubrió que había presos clandestinos allí.
CNMH: A grandes rasgos, ¿En qué consiste el proyecto "Mapeo de archivos de la Fiscalía General de la Nación en Colombia con perspectiva al trabajo de los mecanismos de justicia transicional"?
L.O: Es una asesoría a la Fiscalía con base a la situación de sus expedientes de casos y los temas de información que pueden ser relevantes para los mecanismos de justicia transicional. Actualmente hay casos de diferentes épocas que no están registrados en una base de datos central, o bien hay diferentes bases centrales de diferentes épocas. La intención del proyecto es que la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y la Comisión de la Verdad, por ejemplo, puedan tener acceso a esta información. Visitamos despachos y archivos en distintos lugares del país donde existen carpetas y casos sin registrar. A través de esas experiencias, les hicimos también unas recomendaciones sobre las proyecciones en términos de tiempo y contrataciones. También dimos algunas recomendaciones prácticas y dejamos a su disposición una red de especialistas en temas de archivos en diferentes países.
CNMH: ¿Por qué se interesa Swisspeace en este proyecto?
L.O: SwissPeace es un instituto de investigación académica orientado a la práctica. Tratamos de mantener una visión crítica hacia los procesos de justicia transicional y apoyar en los procesos de transición para que se haga de la mejor manera, con base a las experiencias internacionales que hemos tenido. Nos interesó el proyecto porque estamos convencidos de que las carpetas de casos que tiene la Fiscalía tienen información sumamente importante para los mecanismos de justicia transicional y para el proceso de transición en Colombia.
El Centro Nacional de Memoria Histórica, con acciones como estas, se vincula y pone a disposición del Estado y la Sociedad en general, en el marco de los mecanismos de justicia transicional fijados en el Acuerdo de Paz, el conocimiento técnico con base en las experiencias adquiridas, para que los archivos puedan ser protegidos, conformados, apropiados y usados socialmente en perspectivas de no repetición y reconciliación social.
Publicado en Noticias CNMH