Entre 2002 y 2004 el Frente “Cacique Pipintá” de la organización contrainsurgente “Bloque Central Bolívar” entró al municipio de Quinchía, Risaralda, y perpetró varias masacres, hechos que causaron el pánico y el desplazamiento de la población.
Cientos de luces se encenderán para evocar la memoria de todas aquellas personas asesinadas, desaparecidas y desplazadas durante los primeros años del siglo XXI, época en la que se vivió una de las etapas más complejas y duras de la violencia en el este departamento. A través de la luz, los habitantes de Quinchía piden que no se apague el recuerdo de quienes ya no están y que no se repitan esas historias que azotaron a una población injustamente señalada.
Asimismo, una “chiva de la memoria”, en la que viajarán todas aquellas personas solidarias con el proyecto “Quinchía: una memoria de resistencia oculta entre montañas”, recorrerá distintas veredas. En cada una de las veredas visitadas, la comunidad pondrá una placa conmemorativa y sembrará árboles como expresión simbólica de esas vidas que no se olvidan. Al final de la caravana habrá una celebración religiosa y un acto musical, a través de los cuales se quiere expresar un reconocimiento al valor, al significado de un municipio que hoy es escenario de restitución, reparación y memoria, pero que diez años atrás padeció una experiencia que las nuevas generaciones no deben olvidar, pero tampoco repetir.