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Cátedra de la paz en la Universidad Javeriana

Noticia

Autor

Maria de los Ángeles Reyes

Fotografía

CNMH

Publicado

10 Ago 2015


Cátedra de la paz en la Universidad Javeriana

“Creemos que la memoria es una plataforma de construcción de paz” Profesor Jefferson Jaramillo, Coordinador del Centro de Estudios Sociales y Culturales de la Memoria de la Universidad Javeriana.


La Universidad Javeriana dará inicio este semestre a dos proyectos que buscan contribuir a la construcción de memoria histórica en el país. Por un lado se lanzará oficialmente el Centro de Estudios Sociales y Culturales de la Memoria (CESYCME), y, por otro lado, se implementará la Cátedra de Paz que empezará el próximo 14 de agosto.

El centro de estudios de la memoria, adscrito a la Facultad de Ciencias Sociales de la universidad, tuvo su lanzamiento oficial el pasado 6 de agosto. Según el profesor Jefferson Jaramillo, director del departamento de sociología, esta iniciativa surgió hace un año y medio a raíz de la inquietud de varios profesores e investigadores de la facultad por agrupar y organizar el trabajo que, de manera independiente, se venía realizando alrededor del tema de la memoria histórica.

Con apoyo del Centro Nacional de Memoria Histórica se está trabajando bajo la figura de un “convenio-marco” que abarcará varias formas de apoyo institucional y metodológico. Particularmente, el centro de estudios estará vinculado al proyecto de los Grupos Regionales de Memoria. A pesar de estar basado en la sede de Bogotá de la Javeriana, se realizará un informe con base en un caso de estudio en el departamento del Guaviare. El centro de estudios aprovechará la cercanía ya existente entre algunos de sus miembros y la comunidad afrodescendiente del corregimiento de Puerto Gaviotas, en Calamar, que fue víctima de varias formas de violencia paramilitar.

Johanna Torres Pedraza hace parte del centro de estudios sobre la memoria y está trabajando en su tesis de grado para que sea publicada allí. Para ella, la importancia de que la memoria histórica sea abordada también desde la academia radica principalmente en el hecho de que en un contexto como el colombiano, en el que se busca construir memoria en medio del conflicto, la voz de las víctimas corre el peligro de ser influenciada por la institucionalidad. Los contextos académicos, sin embargo, abren el espacio para “discutir temas políticamente álgidos sobre nuestro pasado y presente violento y vincula a la reflexión a otros sectores de la sociedad aparte de las víctimas y los sectores políticos interesados”, dice Johanna.

La Cátedra de Paz

Bajo este mismo convenio también se dará inicio a la Cátedra de la Paz. Según el profesor Jaramillo, es una adaptación de la cátedra ¡Basta ya! que por motivos logísticos no pudo implementarse como un curso en el pensum de los programas de la universidad.

La Cátedra de Paz se dictará, entonces, como una serie de conferencias abiertas al público y gratuitas que se realizarán todos los viernes, a partir del 14 de agosto y hasta el 30 de octubre, en las instalaciones de la Universidad Javeriana. Las clases serán dictadas por varios investigadores que han tratado muy de cerca los temas dentro del CNMH, como Martha Nubia Bello, Rodrigo Uprimny y Andrés Suárez.  

Quienes estén interesados en participar deberán realizar su inscripción en link (http://cienciassociales.javeriana.edu.co/departamentos/historia/catedra-paz) y al final se otorgarán certificados de asistencia. Además, todos los contenidos de la cátedra se subirán al blog del curso que también está abierto al público (https://catedrapaz.wordpress.com/).

 


Cátedra, Paz, Universidad Javeriana

Memoria para todos

Noticia

Autor

CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

10 Ago 2015


Memoria para todos

Cada vez más la memoria histórica alcanza nuevos sitios y se abre a más públicos. Después del lanzamiento en la Feria Internacional del Libro de Bogotá, los productos accesibles del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) se presentarán en varias regiones del país, garantizando así el derecho a la información que tienen las víctimas y la población en general, teniendo en cuenta especialmente a aquellas personas en situación de discapacidad.


Medellín, Popayán y Santa Marta serán las tres ciudades a las que el CNMH llegará en este segundo semestre del año 2015 para la presentación de sus productos accesibles, una colección de materiales para que las personas con discapacidad visual puedan conocer de primera mano las historias y memorias del conflicto armado colombiano. 

La serie radial “La vida cuenta” en braille, y las versiones en braille, libro hablado y macrocaracteres del informe Basta ya! Colombia: memorias de guerra y dignidad son los primeros productos de esta colección que se empezará a distribuir en diferentes bibliotecas del país con programas para personas en situación de discapacidad. La presentación y divulgación de la línea de productos accesibles se hace gracias al apoyo logístico y trabajo conjunto con laOrganización Internacional para las Migraciones (OIM) y USAID.

“Con estas visitas queremos empezar a conectar con algunas regiones el accionar del CNMH, especialmente con las personas en situación de discapacidad, para que conozcan y tengan acceso directo a materiales sobre memoria histórica y conflicto armado en formatos creados específicamente para ellos” expresa Nayibe Sánchez delenfoque de discapacidad del CNMH.

La Biblioteca Pública Departamental Rafael Maya en Popayán (13 de agosto), la Biblioteca de la Universidad de Antioquia (22 de septiembre) y la Biblioteca Cajamag en Santa Marta (26 de septiembre), además de en la Fiesta del Libro y la Cultura de Medellín (octubre), serán los lugares en los que presentaremos y entregaremos algunos productos de la colección de materiales accesibles.

Actividades con entrada libre hasta completar el aforo del auditorio.

El subtitulaje de los productos audiovisuales y la inclusión del lenguaje de señas para los documentales del CNMH, son otros de las herramientas que próximamente se ofrecerán para que cada vez más personas conozcan, se acerquen y se empoderen de una memoria histórica de más de 50 años de conflicto, que nos pertenece a todos.

 


Derechos Humanos, Medellín, Memoria, Popayán, Santa Marta

Comunicado a la opinión pública sobre el Museo Nacional de la Memoria

Noticia

Autor

CNMH

Fotografía

César Romero

Publicado

11 Ago 2015


Comunicado a la opinión pública sobre el Museo Nacional de la Memoria

Del 10 al 21 de agosto la opinión pública puede conocer en el Archivo Distrital, las planchas de los 72 Anteproyectos que participaron en el Concurso Arquitectónico Internacional para el diseño del Museo Nacional de la Memoria. 


En esta exposición se exhibirá  el acta del informe inicial del jurado, emitido por la Sociedad Colombiana de Arquitectos.

Debe señalarse que se trata de un informe de evaluación, que desde el punto de vista legal, se encuentra sometido durante tres (3) días hábiles desde el 10 de agosto, a las observaciones que se formulen, conservando el anonimato propio de este tipo de concursos de arquitectura (identificación por códigos de los proponentes), respecto de su contenido. Esto se constituye en una oportunidad para que eventualmente los jurados reconsideren parcial o totalmente, o confirmen, su decisión inicial, cuestión que será conocida al momento de adoptar la decisión definitiva cuya lectura se realizará el día jueves trece (13) de agosto de 2015, según el cronograma establecido en las bases del concurso, como lo ha informado el Doctor Carlos Gacha Asesor Jurídico de la Sociedad Colombiana de Arquitectos.

Para leer el acta completa descargue aquí >>

 


Museo Nacional de la Memoria, Publicaciones CNMH

Mandarinas

Noticia

Autor

CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

11 Ago 2015


Mandarinas

En 1992 Georgia, Europa del este, se encontraba en medio de una guerra interna: la región de Apkhazeti buscaba su independencia y los georgianos defendían su territorio. Un pueblo de inmigrantes estonios quedó en la mitad del fuego cruzado y la mayoría de sus habitantes decidieron regresar a su país. Dos vecinos, Ivo y Margus, sin embargo, se quedaron: Margus esperando vender la última cosecha de mandarinas e Ivo simplemente porque no quiere abandonar su hogar. En el pueblo hubo un tiroteo y dos hombres sobrevivieron quedando gravemente heridos: uno georgiano y otro de Apkhazeti. Ivo los acoge en su casa, les da comida, y los cuida mientras espera que se recuperen.

– Margus: ¿No te da miedo que se maten? 

– Ivo: No, el de Apkhazeti dio su palabra…

– Margus: ¿Y el Georgiano?

– Ivo: También

Mandarinas, nominada este año a mejor película de habla extranjera en los Premios de la Academia,  logra capturar a perfectamente la empatía humana en medio de los peores conflictos. El gesto de Ivo de salvar la vida de estos dos hombres, los obliga a convivir bajo el mismo techo, aun odiándose a muerte, y les enseña, al final, que sus diferencias son tan efímeras y frágiles como el valor mismo de sus vidas en medio de la guerra.

A pesar de que la situación interna en esa región de Georgia se estabilizó en 1993, el conflicto, en menos de dos años, dejó cerca de 2500 muertos. En Colombia, tras seis décadas de un conflicto que se ha complejizado con el tiempo, los que eran enemigos se han visto obligados a volver a convivir unos con otros. Es común ver barrios donde viven personas desplazadas al lado de personas desmovilizadas, demostrando que, así como en Mandarinas, la reconciliación y la convivencia pacífica, incluso en medio del clima de tensión que supone estar en medio de una guerra, es, de alguna manera, posible.

 

Publicado en Cine + memoria


Cine+Memoria


Cine+Memoria

Religiones hablan sobre su papel en la paz

Noticia

Autor

Maria de los Ángeles Reyes
Periodista del CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

11 Ago 2015


Religiones hablan sobre su papel en la paz

Líderes de distintas religiones se reúnen en el encuentro de Iglesia, voces y memoria para hablar sobre su papel en el fin del conflicto y en la paz.


La Revista Optantes, de los frailes dominicos de la Universidad Santo Tomás, realizará, este jueves 13 de agosto y hasta el sábado 15, su décimo segundo congreso en las instalaciones de la universidad.

En esta ocasión, el evento  tiene como título Iglesia, voces y memoria y abrirá la discusión sobre el papel de las religiones en la construcción de paz. El encuentro, que buscará incluir en el debate a distintos sectores de la sociedad, contará con invitados de diferentes religiones y otras orillas políticas.

Según fray Fabio Alexis Sánchez, que hace parte de la Revista Optantes, la idea es darle una mirada amplia e incluyente al papel histórico que han tenido todas las iglesias y todas las denominaciones religiosas en el conflicto y así mismo reflexionar sobre su papel en el posconflicto. “La idea no es solo que hable la Iglesia Católica sino que hablen todas las iglesias. La idea no es que solo hablen las iglesias sino también las víctimas, los victimarios y los políticos”, dice el religioso.

En el congreso participarán obispos católicos y anglicanos, teólogos musulmanes, rabinos y pastores. Además se realizará un panel de víctimas de varias regiones y excombatientes como Yezid Arteta Dávila, excomandante de las Farc, y  Carlos Arturo Velandia, exintegrante del Eln. También varios miembros de la política nacional hablarán del tema, como la excandidata presidencial por el partido Conservador, Martha Lucía Ramírez, el gobernador del Meta, Alan Jara, y la exsenadora Piedad Córdoba.

El Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) participará en el congreso con un estand informativo y, además, el filósofo investigador Alberto Verón, será panelista principal en el evento. Verón hará una reflexión académica respecto al papel de lo rural como un espacio comúnmente olvidado en la filosofía: “la vereda, el campo, no han sido pensados por el filósofo cuando se pregunta por las víctimas y por la memoria”, afirma.

Los interesados en participar en el congreso deberán realizar su inscripción en la página de la Revista Optantes http://www.revistaoptantes.org.co/

La inversión para participar es de 120 mil pesos para el público general, cien mil para estudiantes y docentes universitarios y ochenta mil para religiosos. 

 


Líderes religiosos, Paz, Religión, Víctimas

Ganadores del Concurso Arquitectónico del Museo Nacional de la Memoria

Noticia

Autor

CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

12 Ago 2015


Ganadores del Concurso Arquitectónico del Museo Nacional de la Memoria

El Concurso Arquitectónico Internacional del Diseño del Museo Nacional de la Memoria, organizado por el Centro Nacional de la Memoria Histórica (CNMH) y la Sociedad Colombiana de Arquitectos, finalizó este jueves 13 de agosto de 2015 a las 11:00 a.m., hora en la que los jurados confirmaron su decisión inicial al proclamar como diseño ganador la propuesta titulada “Entre la Tierra y el Cielo” de la firmas: MGP Arquitectura & Urbanismo de Colombia y Estudio Entresitio de España.


Equipo ganador:

 

fotos ganadores concurso

Fotografía: Arq. Maria Hurtado de Mendoza (Estudio Entresitio) y Arq. Felipe Gonzalez Pacheco (MGP Aqruitectura y Urbanismo).

MGP ARQUITECTURA Y URBANISMO (COLOMBIA)

Arq. Felipe Gonzalez Pacheco
Arq. Alvaro Bohórquez
Equipo de trabajo: Arq. Uriel Rivera y Arq. Jose Cohecha 

ESTUDIO ESTRESITIO (ESPAÑA)

Arq. Maria Hurtado de Mendoza
Arq. Cesar Jimenez de Tejada
Arq. Alvar Ruiz Villanueva
Arq. Maria Urigoitia

 

La audiencia de proclamación 

El evento público de proclamación se realizó en el auditorio del Archivo Distrital de Bogotá, donde estarán exhibidos hasta el 21 de agosto los 72 proyectos participantes. La audiencia contó con una concurrida asistencia de profesionales del campo de la arquitectura quienes escucharon la lectura del informe final y realizaron preguntas al jurado. Así se terminó uno de los mas importantes concursos de arquitectura del país.

La decisión del jurado

El jurado determinó que “Entre la Tierra y el Cielo” es el diseño ganador por votación unánime. 

Los cinco integrantes del jurado revelaron que el diseño ganador propone un viaje interior, atractivo, donde los visitantes encontrarán una gran variedad de caminos, entre las amplias salas de exposición hacia las terrazas: un microcosmos montañoso donde los visitantes podrán sentir la energía de la ciudad y disfrutar del paisaje andino de Bogotá. 

 

La cubierta del edificio se compone de un complejo de azoteas interconectadas que dan la oportunidad de reunirse, leer e incluso encontrar momentos de silencio para la reflexión y el recuerdo. El jurado ha destacado que, aunque se trata de un volumen sólido, los arquitectos lograron con éxito una planta baja transparente y altamente permeable que integra la escultura preexistente y las áreas de espacio público cercanas. El segundo diseño ganador fue “La torre de luz” de la firma Taller Síntesis. S.A.S. de Medellín, y en tercer lugar fue seleccionado “Un peregrinaje por el jardín de la esperanza”, del arquitecto David Delgado. Arquitectos de Bogotá. 

 

Además de los tres mejores proyectos, los jurados seleccionaron tres propuestas a las que se les otorgó menciones honoríficas.

El Jurado

El jurado estuvo compuesto por los reconocidos arquitectos Juan Pablo Ortiz, Clemencia Escallón, Mauricio Pinilla, Mario Figueroa y Efraín Riaño. Un equipo cuidadosamente seleccionado que cuenta con amplia experiencia en diseño arquitectónico, urbanismo, bioclimática, museografía y diseño de archivos. Dos de los miembros del jurado fueron ganadores de convocatorias de este tipo y tienen experiencia en el diseño de museos de la memoria en Bogotá y en Santiago de Chile. [Conoce los perfiles de los jurados]

Premios 

El ganador del concurso será premiado con 670 millones de pesos colombianos (aproximadamente USD 245.000). Además, el contrato para el desarrollo del proyecto, una suma de 3.200 millones de pesos colombianos (aproximadamente USD 1,2 millones) se ofrece como una cuota para desarrollar el diseño del proyecto. Al ganador del segundo lugar se le adjudicará 134 millones de pesos colombianos (aproximadamente USD 49.000) y al tercer premiado 89 millones de pesos colombianos (aproximadamente USD 32.000).

El Concurso

La competencia de una sola ronda fue abierta para arquitectos calificados, personas físicas o jurídicas, nacionales o extranjeras, ya sea en forma individual, como una empresa conjunta o consorcio. Los candidatos internacionales tuvieron como requisito establecer una alianza con un representante de Colombia. 

El concurso fue lanzado el 9 de abril de 2015, las reglas finales de la competencia se publicaron el 27 de mayo y el registro se llevó a cabo el 19 de junio pasado. Además de Colombia, se recibieron solicitudes de los Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Francia, España, Austria, Hong Kong, y también de América Latina con México, Chile y Brasil.

Se recibieron 109 aplicaciones y se presentaron 72 propuestas, cada una de ellas compuesta por seis planchas para un total de 432, todas ellas exhibidas en las dos salas del tercer piso del Archivo Distrital desde el 10 de agosto.

El Museo Nacional de la Memoria Histórica

La Ley 1448 otorga al Centro Nacional de Memoria Histórica la función de “diseñar, crear y administrar un Museo de la Memoria, destinado a lograr el fortalecimiento de la memoria colectiva acerca de los hechos desarrollados en la historia reciente de la violencia en Colombia”. Este museo, según la Ley, “deberá realizar las acciones tendientes a restablecer la dignidad de las víctimas y difundir la verdad sobre lo sucedido”.

Asimismo, este lugar de memoria es un avance en el deber de memoria del Estado que redunda en la garantía del derecho de la sociedad colombiana a la construcción permanente de la memoria y la paz; se constituye en sí mismo en una de las medidas de reparación y de satisfacción para las víctimas del conflicto armado en Colombia.

Con este marco legal, el Estado responde a la exigencia de distintos sectores de la sociedad, especialmente de organizaciones de víctimas y de derechos humanos, sobre la necesidad de implementar políticas de la memoria para el esclarecimiento, la comprensión de la verdad sobre el conflicto armado, la dignificación de las víctimas y la construcción de garantías de no repetición.

La construcción del Museo Nacional de la Memoria supone dos líneas estratégicas. Además de la construcción física, la construcción social implica un amplio proceso de diálogo sobre los criterios y principios conceptuales y funcionamiento del mismo. En ello resulta fundamental la participación protagónica de las víctimas en el diálogo, así como de los diferentes promotores de las iniciativas y acciones de memoria de carácter artístico, cultural, comunicativo, que el CNMH tiene como misión apoyar.

Entrevista con Mario Figueroa – Jurado Internacional del Concurso

Publicado en Noticias CNMH



Arquitectura, Ganadores, Museo Nacional de la Memoria

No hay seguridad para los líderes de Tumaco

Noticia

Autor

CNMH

Fotografía

© Centro Nacional de Memoria Histórica

Publicado

12 Ago 2015


No hay seguridad para los líderes de Tumaco

El pasado 3 de agosto en horas de la mañana, Genaro García -representante legal del Consejo Comunitario Alto Mira y Frontera- se desplazaba por la carretera que va de Chilvi al corregimiento de San Luis Robles, zona rural de Tumaco, en medio del recorrido dos hombres que se movilizaban en moto interceptaron el vehículo y luego de revisar las identidades de todos los pasajeros se llevaron a Genaro. Minutos después, lo asesinaron.


Lamentablemente, la muerte de este líder no es la primera que se registra en Tumaco, un municipio donde varios líderes y representantes de víctimas han sido silenciados ante las denuncias que interponen. Desde el Centro Nacional de Memoria Histórica hablamos con José Luis Foncillas, coordinador de la Casa de la Memoria del Pacífico Nariñense, para consultar la situación que viven esta región del país y los procesos de memoria que se adelantan para no olvidar lo que está sucediendo.

El pasado 3 de agosto fue asesinado Genaro García, un caso más que engrosa la larga lista de líderes asesinado en Tumaco. ¿Qué nos puede contar de él y de lo que han tenido que vivir los líderes en la costa pacífica nariñense?

No alcancé a conocerlo personalmente, sin embargo, Genaro García es otro caso de la cadena de líderes asesinados en Tumaco. Él era el representante legal del Consejo Comunitario Alto Mira y Frontera, un Consejo que antes tuvo a otro líder, Francisco Hurtado, quien también fue asesinado en el año 1997. Ambos trabajaron con la hermana Yolanda Cerón, quien se desempeñaba como directora de la Pastoral Social de Tumaco hasta el 2001, año en que fue asesinada mientras salía de su lugar de trabajo.

Esta no es una situación nueva, los líderes en Tumaco han sido amenazados y asesinados sistemáticamente por grupos armados hace casi 20 años, como sucedió con Francisco Hurtado y con la hermana Yolanda Cerón. Los asesinatos han generado mucho miedo al punto que los Consejos Comunitarios ya no quieren denunciar lo que sucede, sienten un gran temor por contar esas amenazas.

¿Qué medidas cree que son necesarias para mejorar esta situación? 

Visibilizar más lo que sucede en la región sería una medida, a veces parece que Tumaco no fuera Colombia y solo es noticia cuando sucede algo grave. Por ejemplo del Consejo Comunitario Alto Mira y Frontera han sido asesinados dos representantes legales y tres miembros de la junta directiva, es decir de un solo Consejo, de uno pequeño, han sido asesinados cinco líderes y ese drama que se está viviendo no es visibilizado a nivel nacional. Tumaco solo se muestra cuando se vuela un oleoducto, algo que en los últimos 20 años ha pasado al menos 15 veces,  y somos noticia únicamente cuando hay intereses políticos de por medios, sin embargo, Tumaco es sistemáticamente invisibilizado. 

Es necesario que se muestre lo que pasa en Tumaco al igual que otras regiones del país, darle el mismo eco y acabar la indiferencia ¡Aquí también somos colombianos!

¿Qué se hace desde la Casa de la Memoria del Pacífico Nariñense para visibilizar esta situación?

La Casa de la Memoria de la Costa Pacífica Nariñense nace con ese propósito, visibilizar lo que sucede en el conflicto armado que tiene sumido a Tumaco en una de las ciudades con más hechos victimizantes del país. La Casa de la Memoria ha trabajado año tras año por la memoria de las víctimas, se les recuerda mayormente a través de fotografías y en este momento unas 500 familias se han acercado a traer las fotos de sus familiares. Esto se saca a las calles, a las vías públicas, se hacen marchas, se hacen actos de memoria, el último fue el 9 de abril, fecha en la que recordamos a Miller Angulo, otro gran líder que perdimos hace 2 años, uno de los representante de la Mesa de Víctimas que fue asesinado en plena calle de Tumaco.

La Casa de la Memoria tiene un lema: “Que nadie diga que no pasa nada”. Por eso no solo hacemos memoria hacia el pasado, sino que denunciamos las graves violaciones de derechos humanos que suceden en el presente. También hacemos trabajo con jóvenes de colegios que visitan la Casa de la Memoria y con los muchachos que tienen que prestar el servicio social obligatorio cuando terminan el bachillerato, con ellos realizamos acciones de defensa y promoción de los derechos humanos y de la memoria en las calles de Tumaco.

Además, trabajamos con las víctimas. La Casa de la Memoria es el punto de encuentro de la Mesa de Víctimas Municipal, aquí es donde hacen sus talleres y reuniones. Finalmente, hacemos memoria con los informes regionales, “Que nadie diga que no pasa nada”, los cuales se hacen desde la Diócesis de Tumaco para denunciar la grave situación de derechos humanos y el conflicto que se vive en la región.

¿Qué llamado hace a las autoridades y a la sociedad en general para que pongan sus miradas en Tumaco?

Nuestra Casa de la Memoria es de la Costa Pacífica Nariñense. Los municipios de esta costa han sido históricamente olvidados por el Estado y por Colombia, por ejemplo La Tola, Mosquera y El Charco, tienen un 90% de necesidades básicas insatisfechas hoy, no en el siglo 19, hoy en pleno siglo 21. En Tumaco tampoco hay trabajo, en la región hay un 70% de desempleo y consideramos que esta es la peor violación de derechos humanos producida por el Estado y necesitamos que el mismo Estado invierta en estas regiones, pues esta situación es el caldo de cultivo para que todos los grupos armados ilegales aprovechen y siembren el terror. 

El primer llamado es a que los derechos sociales, económicos y culturales de la población del pacífico nariñense sean respetados como en el resto de Colombia. También le decimos a los grupos armados que respeten la vida y los derechos de la población de esta región, golpeada por el desplazamiento y los homicidios. Este es un llamado que la Diócesis de Tumaco ha venido haciendo desde la época de hermana Yolanda Cerón, quien fue asesinada precisamente por esas denuncias incomodas hacia el Estado y sus nexos con las AUC,  en su momento Yolanda los denunció sin miedo por la radio, por las emisoras, por comunicados. Genaro García era otra de esas voces incomodas que en vez de ser escuchadas fueron eliminadas.

 


Líderes, Tumaco

Jaime Garzón enseñó a reírnos de nuestra tragedia

Noticia

Autor

Juliana Duque Patiño

Fotografía

Edgar Humberto Álvarez

Publicado

12 Ago 2015


Jaime Garzón enseñó a reírnos de nuestra tragedia

Jaime Garzón Forero fue asesinado hace 16 años. De los responsables se sabe que hay un muerto condenado, y un exmilitar y el exsubdirector del DAS, José Miguel Narváez, están vinculados en el proceso. Sus asesinos y determinadores del crimen sí que tenían un pésimo sentido del humor.


En una de esas entrevistas noventeras que Pacheco le hizo a Jaime Garzón, y que por estos días incrementan sus visitas en YouTube, Garzón ratifica que, a pesar de lo ‘mamagallista’, es un tipo muy trascendental: “Yo creo en la vida, creo en los demás, creo que este cuento hay que lucharlo por la gente, creo en un país en paz, creo en la democracia, creo que lo que pasa es que estamos en malas manos, creo que esto tiene salvación”.

Con esta misma sentencia se encuentran los visitantes a la página web que reabrió la familia de Jaime en su honor: www.jaimegarzonforero.com, con el sentido de esperanza y deseos de vivir que transmite, es como los colombianos recuerdan al periodista asesinado en Bogotá hace 16 años (13 de agosto de 1999).

Garzón era abogado e historiador de formación. Ejerció como docente, investigador, alcalde menor de la localidad de Sumapaz de Bogotá, entre otros roles, pero el reconocimiento y el aprecio de millones de colombianos es gracias al inteligente y polémico ejercicio periodístico que realizó. Creó personajes como Godofredo Cínico Caspa, Dioselina Tibaná y Heriberto de la Calle que nos explicaron, con agallas y sin pelos en la lengua, las irregularidades políticas y sociales de nuestro país.

A la extrema derecha, y al parecer a fuerzas oscuras del Estado, no le gustaba lo que Jaime tenía para decir. “Lo que pasa es que no tienen buen sentido del humor. Uno les pone el espejo y se asustan, se molestan”, decía Garzón al respecto. Para resolver la discrepancia, lo asesinaron.

Carlos Castaño, jefe de las Autodefensas Unidas de Colombia, fue condenado, en el 2004, a 38 años de cárcel por el asesinato de Garzón. Para entonces Castaño ya había sido desaparecido y cuando se ratificó el fallo, se confirmó su muerte. José Miguel Narváez, quien fue subdirector del DAS (Departamento Administrativo de Seguridad) está siendo procesado por este crimen después de que varios jefes paras, postulados en Justicia y Paz, aseguraran que Narváez participó en el homicidio. Narváez ha negado su responsabilidad. Otro presunto implicado es el coronel retirado Jorge Plazas Acevedo quien ha sido llamado a juicio.

Los abogados de la familia Garzón han argumentado que este asesinato fue parte de un ataque sistemático de los paramilitares contra defensores de Derechos Humanos y dirigentes de izquierda. Por este y otros motivos, solicitaron a la Fiscalía que declarara el homicidio como un crimen de lesa humanidad. Pero el pasado mes de junio la Fiscalía negó dicha solicitud aduciendo que “no se vislumbra que el asesinato de Jaime Garzón hubiera ocasionado un perjuicio directo a una colectividad con características étnicas, religiosas o políticas (…) o que el homicidio de Jaime Garzón hubiera sido de tal magnitud que afectara a la humanidad”.

Mientras el proceso sigue, los hermanos del humorista que más echa de menos el país, mantienen impecable su memoria a través de proyectos e iniciativas como la página web, la recuperación de la estatua de Heriberto de la Calle y la publicación de un nuevo libro que presentará esta noche Marisol Garzón (hermana) en la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá, Jaime Garzón, ‘lea pa’ que hablemos’ N°1.

Hoy, en el aniversario número 16 de la muerte de Jaime Garzón, el Centro Nacional de Memoria Histórica los invita a visitar el sitio web www.jaimegarzonforero.com y a recordar la genialidad de este colombiano inigualable.

 


Historia, Jaime Garzón, Memoria, Víctimas

La arquitectura de la resistencia en Colombia

Noticia

Autor

Fernando Viviescas M

Fotografía

CNMH

Publicado

14 Ago 2015


La arquitectura de la resistencia en Colombia

Arquitecto Urbanista, Coordinador, por parte del Centro Nacional de Memoria Histórica, del Concurso Internacional para el anteproyecto del Museo Nacional de la Memoria, en compañía del Arquitecto Sergio Trujillo, Coordinador por parte de la Sociedad Colombiana de Arquitectos.


En un importante documento, producido a principios del año pasado, el Jefe de la delegación del Gobierno en las conversaciones de Paz que se llevan a cabo en La Habana, el Dr. Humberto de la Calle, se refirió al papel que tiene “El arte en la búsqueda de la paz”. En dicho escrito no solo no se incluye a la Arquitectura dentro de las manifestaciones artísticas sino que, en las proyecciones o en las funciones que se les atribuyen a estas expresiones creativas en el “llamado postconflicto”, tampoco se percibe claramente que las disciplinas del espacio tengan algún protagonismo “en la implantación de una paz firme.”

Como es lógico pensar en una sociedad como la colombiana que —a lo largo de casi ochenta años de buscar erráticamente un lugar en el mundo contemporáneo— fue naturalizando la violencia (de todo tipo) como un componente fatal de su entidad como Nación, todas las actividades constitutivas de su cotidianidad y de su perspectiva estratégica, de una forma u otra, tienden a ignorar el enorme peso que los efectos de esa violencia ejerce en la definición tanto de su identidad estructural como de su funcionamiento y de su proyección.

Sin embargo, en ningún ámbito pueden ser más apreciables las consecuencias de asumir la construcción de la sociedad en medio de la violencia que en la materialización tangible que asume esa misma sociedad, esto es, en su espacialidad y, para el caso nuestro, fundamentalmente en la CIUDAD COLOMBIANA, la cual no sólo es el producto más genuino de ese trasegar en el medio de la barbarie sino el sitio que ha servido de albergue para la gran mayoría de los hombres y mujeres que al sobrevivir han edificado esta sociedad y la seguirán erigiendo hacia el futuro.

Por ello, ahora que con las conversaciones de Paz se dan las circunstancias para abocar una construcción consciente de nuestra sociedad, es indispensable que las disciplinas del espacio se asuman como referentes para emprender esa tarea de reconstitución: que puedan contribuir “en la fase de aclimatación de la paz (,) donde —al decir de de la Calle— la expresión artística despliega su mayor potencial.”

Se abre una oportunidad, muy posiblemente irrepetible, para que estas disciplinas se instituyan como partes constitutivas en la configuración del país como sociedad civilizada en el concierto de las naciones en el siglo XXI.

Como lo plantea el Señor Comisionado: “Terminado el conflicto, se abre… el momento de las transformaciones de la sociedad.” De la formulación de un proyecto de nación que efectivamente apueste por una sociedad en la cual no sólo se busque sistemática e inteligentemente dignificar la existencia individual y colectiva (inicial y especialmente de las víctimas directas) sino restablecer críticamente, esto es, en forma crecientemente consciente, las relaciones entre los hombres y mujeres y de ellos con los demás elementos de la Naturaleza y con las expresiones materiales (particularmente con el territorio y, dentro de él, con las CIUDAD) e imaginarias que, mediante la cultura, hemos creado en el desarrollo de nuestra historia.

Tanto para formular ese horizonte de futuro como para realizarlo, es en el postconflicto donde tienen su lugar, ya ineludible e irremplazable, las disciplinas de la “proyectación” —el diseño, la arquitectura y el urbanismo— y donde pueden desplegar su inmenso poder imaginativo y constructivo para que, junto a “la palabra, el trazo, la nota y el símbolo” puedan contribuir “en la implantación de una paz firme” que apuntale la formulación y construcción de una sociedad realmente moderna: democrática, equitativa y sustentable.

Ya ubicadas en ese terreno por el Museo, necesariamente, entrarán en colaboración con las demás disciplinas, incluidas las artes y las ciencias sociales y económicas para darle consistencia, viabilidad y expresión tangible (el efecto de demostración) a la dignificación de la existencia, que es el primer arco que se abre una vez abocados a superar la barbarie que ha signado nuestra historia reciente de los últimos ochenta años.

Ese es el horizonte que ha abierto este Concurso Internacional para el Anteproyecto del Museo Nacional de la Memoria.

Las artes de la proyectación han sido consultadas y han respondido con creces no sólo en términos de cantidad, vale decir, de sensibilidad. Setenta y dos 72 anteproyectos, en el marco de más de cien inscripciones, muestran la capacidad de reacción de nuestros arquitectos, urbanistas y diseñadores, que se movilizaron masivamente, para tratar de configurar  un ámbito de expresión de solidaridad con las víctimas de la tragedia y crear una espacialidad que no sólo contribuya a resarcirlas en su identidad y en su recuerdo sino en crear condiciones objetivas para que el conocimiento y la reflexión  se erijan en los baluartes de la no repetición.

Pero respondieron también, y sobre todo, en términos de calidad —expresa profusamente en todos y cada uno de las propuestas— para buscar señalar cómo el Museo se convertirá en el símbolo de la enorme tarea que tenemos los colombianos y las colombianas en la perspectiva de re-crearnos como una sociedad solvente en el ámbito internacional de la civilización contemporánea.

Una vez convocadas de manera comprometida las disciplinas del espacio han demostrado que propenden por la formulación de paradigmas sociales que están por encima de los parámetros tradicionales de “las necesidades básicas insatisfechas” y de las “líneas de pobreza” en las cuales nos han anclado por décadas la violencia y el conflicto armado, como referentes de formulación de proyectos y programas sociales y de todo tipo.

La solvencia formal y funcional que muestran todos los proponentes da cuenta de la capacidad para formularles salidas a la complejidad que encierra esa perspectiva ciudadana e ilustrada, que implica no sólo salir de la barbarie sino introducirnos conscientemente en la construcción colectiva de una Nación donde la dignidad sea la característica fundamental de la existencia individual y colectiva.

Esa profusión de imaginación y de creatividad fue lo que hizo ardua la tarea del Jurado al cual hay que reconocerle por su idoneidad pues estuvo a la altura del reto que implicaba responder a la gran altura que habían señalado los concursantes.

En esa combinación de sensibilidad, capacidad, seriedad y responsabilidad de exponentes y de jueces estriba la fortuna del Concurso que brinda, como resultado, un Museo Nacional de la Memoria (MNM) que con solvencia ética y estética puede mostrarse -al lado de todos los demás lugares de memoria que con el liderazgo de las víctimas se han levantado en todas las regiones del país-, en el inicio del Eje de la Paz y la Memoria de Bogotá, como el símbolo del valor y la resistencia del pueblo colombiano a la barbarie, que son los principales atributos de la esperanza de una sociedad que se apresta a aprovechar creativa y solidariamente, como diría García Márquez, su “segunda oportunidad sobre la tierra.”

Bogotá, Agosto 13 de 2015.

 


Arquitectura, CNHM, Colombia, Resistencia

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