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Medellín conversó sobre su ¡Basta Ya!

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Autor

Tatiana Peláez

Fotografía

CNMH

Publicado

14 Jul 2015


Medellín conversó sobre su ¡Basta Ya!

Cerca de 250 personas asistieron el pasado 10 de julio en el Museo Casa de la Memoria de Medellín al evento de presentación del proyecto Medellín, ¡Basta Ya!, una iniciativa de la Alcaldía de Medellín y Corporación Región apoyada por el Centro Nacional de Memoria Histórica y el Ministerio del Interior.


A las 3:30 p.m. inició al evento con la intervención del vicealcalde Luis Fernando Suárez, quien inició disculpando la ausencia del Ministro de Justicia y del Ministro del Interior. Posteriormente recalcó que Medellín, a pesar de sufrir durante años una de las violencias más abrumadoras, ha sido capaz de entender que sí es posible superar las dificultades. “Para seguir avanzando y soñando necesitamos saber qué pasó y es eso lo que nos convoca hoy aquí”, señaló.

Gonzalo Sánchez, director del Centro Nacional de Memoria Histórica, destacó tres puntos claves sobre el sentido de esta investigación que se encuentra hoy en el desarrollo de la primera fase: es un reconocimiento de una ciudad como víctima, pero también de su resignificación; es un reconocimiento a las organizaciones sociales, de víctimas y de derechos humanos que han realizado una labor impresionante. Y es un reconocimiento a la institucionalidad local por impulsar y tomar la delantera para propiciar espacios de reconstrucción de memoria. Además, señaló la importancia que tiene esta investigación para conocer la complejidad del conflicto ocurrido en Medellín, pues “cuando se conoce la complejidad del conflicto se rompe con la simplicidad de las soluciones”.

Luego se dio paso a un conversatorio que lideró Daniel Botero, de Corporación Región. Allí Fabiola Lalinde narró desde su experiencia personal, a raíz del desaparecimiento forzado de su hijo Luis Fernando Lalinde, las formas como la violencia y el conflicto armado ha golpeado a miles de familias paisas.

Marta Inés Villa, directora de Corporación Región y coordinadora de esta investigación, explicó que en esta primera fase del proyecto, que irá hasta diciembre, se pretende lograr un acercamiento a los relatos y memorias de la población para poder vislumbrar qué es lo que ya se sabe del tema en la ciudad. Esto se debe a que el proyecto no inicia desde cero, explicó, pues Medellín ya cuenta con un acumulado importante de información y conocimiento. El próximo año, en una segunda fase, el objetivo será identificar aquellos hitos de memoria en la ciudad en términos de conflicto armado y relatarlos.

Lucía Gonzalez, directora del Museo Casa de la Memoria, insistió en la importancia de hacer memoria en medio del conflicto. “Las víctimas con sus relatos nos salvan. Advierten que ese dolor no se puede volver a repetir más. No es posible continuar de la misma manera y es necesario decir ¡Basta Ya!”, afirmó.  Además, señaló que en el informe que resulte de esta investigación no se va a contar la historia, sino que será un relato que deberá seguir enriqueciéndose en el tiempo.

Finalmente, Rafael Grasa, miembro del Comité Asesor que acompañará esta investigación, habló sobre las cosas que deben pedirse y esperarse de un ¡Basta Ya!: “reconocibilidad” y reconocimiento; dignificación; construir polifonía de narrativas y relatos; ser un elemento de garantía de no repetición y ser un mecanismo para crear políticas públicas y privadas de construcción de paz.

Publicado en Noticias CNMH



CNMH, Medellín, Violencia

Memorias del Pacífico visitan el CNMH

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Autor

CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

23 Jul 2015


Memorias del Pacífico visitan el CNMH

Líderes del Pacífico colombiano y representantes de la Corporación Manos Visibles visitaron el Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) para conocer los trabajos, los procesos y los proyectos que se tienen con diferentes poblaciones que han sido afectadas por el conflicto armado colombiano.

Desde Tumaco, Quibdó, Buenaventura y otros lugares del Pacífico, 15 líderes de diferentes organizaciones visitaron el pasado jueves las instalaciones del CNMH para conocer el trabajo que se adelanta en sus regiones. 12 nuevos proyectos del enfoque étnico; los informes Bojayá: la guerra sin límites y Buenaventura: un puerto sin comunidad; la obra de teatro Tocando la marea; así como el apoyo a 11 iniciativas de memoria de Tumaco y Buenaventura fueron algunos de los principales logros destacados.

“Si algo ha caracterizado el trabajo del CNMH, es que las investigaciones y en general todos los productos se hacen desde las voces de las víctimas y por eso hoy nos alegra que están acá, para que conozcan más de lo que hacemos y saber sus opiniones” destacó Patrick Morales, coordinador del enfoque étnico.

Igualmente, durante el encuentro se destacó el acompañamiento para la renovación museológica a la Casa de la Memoria del Pacífico Nariñense y el trabajo con las iniciativas que se apoyaron desde el programa de Alfabetizaciones Digitales: Memorias del PacíficoFundescodes y Memorias del Río Atrato.

“Lo que nos han contado hoy nos parecen procesos muy importantes y que tienen que ser continuos porque la guerra no ha parado, especialmente en nuestra región que ha sufrido el conflicto armado por tantas décadas” destacó Luz Mary Rosero líder de Tumaco.

La importancia del enfoque de género en los procesos de memoria histórica, darle importancia a estas iniciativas en el Museo Nacional de la Memoria, llevar estos proyectos a los colegios, universidades y otros espacios de formación y trabajar otros casos de poblaciones victimizadas en el Pacífico fueron algunos recomendaciones que los integrantes de la corporación Manos Visibles dieron a la comitiva del CNMH. Sugerencias que sin duda ayudarán a seguir creciendo y mejorando nuestros procesos de memoria.

 


CNMH, Memorias, Pacífico

CNMH lanza informe nacional de desplazamiento forzado

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Autor

CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

07 Oct 2015


CNMH lanza informe nacional de desplazamiento forzado

En el contexto de la violencia contemporánea, más de seis millones de personas se han visto forzadas a desplazarse dentro y fuera del territorio nacional, lo cual las ha obligado a abandonar sus hogares, sus tierras, sus bienes, sus costumbres, sus comunidades y sus medios de vida.

Esta cifra posiciona a Colombia, después de Siria, como el segundo país a nivel mundial con la mayor cantidad de desplazados internos.

Para entender la dimensión de la cifra: es igual a imaginar el éxodo de dos terceras partes de los habitantes de Bogotá, o la sumatoria de todos los habitantes de las ciudades más pobladas del país como Medellín, Cali y Barranquilla; o de manera más dramática en el escenario internacional, basta con imaginar el éxodo del total de la población de países como Dinamarca, Finlandia, Singapur o Costa Rica.

Asimismo, de acuerdo al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Colombia se ha convertido en el país de origen con el mayor número de solicitantes de refugio en las Américas, con aproximadamente cuatrocientos mil personas. 

 

Una nación desplazada, la nueva serie del Centro Nacional de Memoria Histórica y la Unidad para la Atención y Reparación Integral a las Víctimas, surge como respuesta a los requerimientos elevados por la Corte Constitucional a partir de los autos de seguimiento a la Sentencia T-025 de 2004, en especial del Auto 219 de 2011, en torno a los derechos de verdad y justicia de las víctimas de desplazamiento forzado. Esta serie se compone de cuatro informes, que analizan el fenómeno del desplazamiento forzado desde distintos enfoques y regiones diferentes del país. 


una nacion desplazada portadaUna nación desplazada

El desplazamiento forzado permaneció inadvertido e invisibilizado durante la mayor parte del siglo XX, e incluso a comienzos del siglo XXI, bajo la justificación de que se trataba de una consecuencia o “efecto colateral” de las cinco décadas continuas de conflicto armado interno.

Este informe contrarresta esta justificación simplista y explica los motivos por los cuales el éxodo de millones de mujeres, hombres, niños, niñas, adolescentes, adultos mayores, indígenas, negros, palenqueros, raizales y gitanos, predominantemente de origen campesino y rural, no puede explicarse exclusivamente como consecuencia de la guerra y las lógicas de confrontación entre diferentes actores armados. 

Así, este trabajo profundiza en la manera como el desplazamiento de la población también ha sido el resultado de múltiples prácticas violentas provocadas y promovidas por empresas criminales conformadas por alianzas entre distintos actores –narcotraficantes, empresarios y políticos–. Lo anterior debido a motivaciones ideológico-políticas, y también puramente rentistas funcionales a un modelo de acumulación y apropiación de poder y riqueza. 

Como consecuencia de lo anterior, esta forma de violencia ha resultado funcional a un modelo de desarrollo económico y social excluyente, inicuo, concentrador de la riqueza y discriminatorio, el cual ha sido impuesto a través de la violencia y ha transformado los territorios a partir de la expulsión de sus habitantes tradicionales y ancestrales. 

 

con licencia para desplazar portadaCon licencia para desplazar

Desde 1980 a 2013 los habitantes de la región de El Catatumbo, ubicada en el departamento de Norte de Santander, han sufrido 66 masacres que incidieron en el desplazamiento de más de 120 mil pobladores. De ellos, cerca de 47 mil fueron expulsados de Tibú; región de enorme importancia geoestratégica por ser zona de frontera con Venezuela y por contar con innumerables riquezas naturales.

Este informe describe la magnitud del desplazamiento forzado y las masacres cometidas en El Catatumbo, especialmente en Tibú. El equipo de investigadores buscó, a partir de las memorias de las víctimas, aportar al esclarecimiento de los impactos del desplazamiento en ellas y en los territorios; las causas, motivaciones y repertorios empleados por los responsables, y los contextos estructurales y coyunturales que propiciaron el éxodo forzado.

Finalmente, concluyeron que el desplazamiento violento de la población en Tibú no puede explicarse exclusivamente como efecto de la guerra y el accionar de los armados, sino que se debe a intereses políticos y económicos legales e ilegales vinculados a conflictos por la tierra y los recursos naturales. Todo ello refleja un carácter rentista en el desplazamiento y su funcionalidad para perpetuar un sector rural concentrado, inequitativo, excluyente e improductivo. 

cruzando la frontera portadaCruzando la frontera

En el contexto de la violencia contemporánea en Colombia, miles de ciudadanos se han visto forzados a migrar fuera del territorio nacional, cruzando las fronteras internacionales en búsqueda de protección o refugio en los países vecinos. Estas personas, además de abandonar su hogar y sus actividades económicas, huir de su país dejando atrás sus costumbres y sus formas de vida en Colombia, son víctimas de una modalidad de desplazamiento forzado: el éxodo transfronterizo. 

El alarmante número de víctimas del éxodo transfronterizo ha convertido al desplazamiento forzado en una problemática humanitaria de carácter regional, puesta en evidencia por la prolongación de los efectos del conflicto armado y la violencia generalizada en Colombia hacia los países vecinos. Con el objetivo de contribuir al proceso de reconstrucción de la memoria histórica sobre el desplazamiento forzado, este informe da cuenta del éxodo ocasionado en la frontera entre Colombia y Venezuela, escenario donde se estima el mayor número de víctimas de esta forma de violencia, son 204.340 colombianos refugiados o en situación similar de refugio en Venezuela según Acnur. Pretende visibilizar la prolongación de un fenómeno que trasciende las fronteras con la reconstrucción de los desplazamientos que han tenido lugar en el río Arauca, frontera natural que separa al departamento de Arauca y al estado venezolano de Apure. El informe espera aportar en la reconstrucción de los vínculos existentes entre el desplazamiento forzado en Colombia y la situación de los colombianos desplazados en territorio venezolano. 

pueblos arrasados portadaPueblos arrasados

El desplazamiento forzado ocurrido en el municipio de El Castillo, Meta, que primero fue silencioso e invisible y luego generalizado, ocasionó también el arrasamiento de diferentes expresiones de vida, cuando por lo menos 19 de sus veredas, y cuatro de sus centros poblados, quedaron vacíos luego de las operaciones de retoma de la zona de distención y de la militarización y toma del territorio por parte de los paramilitares. A esto se suma el acumulado de violencia sociopolítica padecida por los habitantes del municipio desde los años ochenta, al fraguarse el exterminio de la Unión Patriótica y del Partido Comunista Colombiano, y la perpetuación de diferentes acciones por la guerrilla de las Farc.

Lo ocurrido en El Castillo ilustra una realidad que la sociedad colombiana está en mora de reconocer y abordar. Así, como consecuencia de la violencia y del desplazamiento forzado no solo se han vaciado territorios enteros (municipios, veredas, corregimientos, centros poblados, barrios, resguardos indígenas) sino que, en silencio y en una penosa impunidad, se han desestructurado proyectos sociales, políticos, económicos, familiares, espirituales, ambientales y culturales.

El presente informe es una invitación a descubrir qué ocurre en los lugares que quedaron vacíos como consecuencia del conflicto armado, tanto desde el punto de vista de los daños y desestructuraciones, como de las resistencias y resiliencias ejercidas por las personas y comunidades que se han visto enfrentadas a este fenómeno. El objetivo es comprender que pasó y explicar cómo y por qué sucedió, con la esperanza de que hechos como estos jamás vuelvan a acontecer en Colombia. 

Lanzamientos de los informes:

Cúcuta // 2 de octubre

Lanzamiento de “Cruzando la Frontera”.
Hora: 8:00 a.m.
Lugar: Aula Máxima de la Universidad Libre – seccional Cúcuta.
Con presencia de Nicolás Montero, Jineth Bedoya, Patricia Ariza y César López.
Entrega del libro.

Desandando los pasos del éxodo. 
Hora: 11:00 a.m. a 1:00 p.m.
Lugar: Barrio Villa del Rosario (frontera de Colombia con el estado de Táchira).
Acto símbolo en La Playita.

Foro Fronteras Solidarias.
Hora: 4:00 p.m a 6:00 p.m.
Lugar: Universidad Francisco de Paula Santander.
Entrega del libro.

Tibú // 3 de octubre

Lanzamiento de “Con licencia para desplazar”.
Hora: 10:00 a.m. 
Lugar: Club Barquito.

La Gabarra // 4 de octubre

Socialización Informe “Con licencia para desplazar”
Hora: 10:00 a.m. 
Lugar: Polideportivo.

Bogotá // 7 de octubre: 

Lanzamiento de la serie completa “Una Nación Desplazada”.
Hora: 6:00 p.m. 
Lugar: Centro Cultural Gabriel García Márquez (Calle 11 No. 5 – 60).
Entrega de los libros.

ENTRADA LIBRE. A los asistentes se les entregará los informes en el evento. 
Inscríbase al evento de BOGOTÁ haciendo click aquí

El Castillo, Meta // 10 de octubre: 

Lanzamiento de informe “Pueblos arrasados”.
Hora: 10:00 a.m. 
Lugar: Institución Edicativa Ovidio Decroly.

Puerto Esperanza, Meta // 11 de octubre: 

Presentación de informe “Pueblos arrasados”.
Hora: 10:00 a.m. 
Lugar: Salón comunal.

 


CNMH, Desplazamiento, Informes

Las investigaciones del CNMH ahora en una APP

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Autor

CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

11 Nov 2015


Las investigaciones del CNMH ahora en una APP

A las 10 de la mañana del 2 de mayo de 2002, un cilindro-bomba lanzado por
la antigua guerrilla de las Farc perforó el techo de la iglesia San Pablo
Apóstol, en Bojayá. En el lugar se refugiaban centenares de personas. El
resultado: 79 fallecidas (48 de ellos niños y niñas), alrededor de 100
lesionados, el desplazamiento de 1.744 familias y grandes fracturas sociales.

Las publicaciones del Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) ahora podrás llevarlas siempre contigo gracias a Memoriapp [Ver sitio de Memoriapp], la aplicación para teléfonos móviles y tabletas con sistema operativos Android y IOS, que contiene 21 investigaciones sobre casos emblemáticos del conflicto armado colombiano.

¿Cómo nace Memoriapp?

En diciembre de 2014 MinTic realiza en Cartagena ‘Apporta a la paz’, una maratón de desarrollo en la que participaron más de 100 desarrolladores y entidades relacionadas con asuntos de víctimas, actores y posconflicto. De este encuentro nace la idea de crear una aplicación para el CNMH y luego de un año de trabajo con MinTic y Gobierno en Línea,  Memoriapp es ahora una realidad.

“Memoriapp será una herramienta muy útil para acercar, a través de las nuevas tecnologías, la historia del conflicto armado colombiano a las nuevas generaciones. Además, a través de esta aplicación las memorias de las víctimas y resistencia podrán ser conocidas desde cualquier lugar del mundo” expresa Giselly Andrea Mejía, coordinadora del desarrollo de la APP.

Descargar los libros, agregarlos a tu biblioteca de favoritos, resaltar con colores los fragmentos del libro que te parezcan interesantes, agrega Bookmarks para pausar tu lectura, compartir fragmentos interesantes en Facebook o Twitter y busca palabras desconocidas en el diccionario son algunas de las funciones de esta nueva aplicación con la cual desde el CNMH queremos seguir avanzando para que la memoria histórica, las memorias de las víctimas del conflicto armado y sus iniciativas y resistencia puedan ser conocidas por más personas.

A continuación te explicamos paso a paso cómo utilizar Memoriapp.

 

1-     Lo primero que debes hacer es buscar e instalar Memoriapp desde App Store o Google Play.

2-     Luego de descargarla y abrirla, en el extremo superior izquierdo de tu móvil o Tablet está el menú principal, en el cual podrás encontrar la información acerca del CNMH, las colecciones y los informes disponibles para descargar, así como los libros y fragmentos que puedes añadir a tus favoritos.

3-     Al ingresar a la sección Colecciones del menú principal, podrás encontrar los libros que hemos incluido en Memoriapp, entre los cuales se encuentra el informe ¡Basta ya! Colombia: Memorias de guerra y dignidad, al igual que los informes sobre los casos de violencia en Bahía Portete, Bojayá, El Salado, El Placer, Trujillo, Segovia y Remedios, y Comuna 13, entre otros.

4-     A continuación debes seleccionar el libro que quieras leer y aceptar abrirlo en la aplicación.

Una vez abierto podrás agregarlo a los favoritos de tu biblioteca y compartirlo en tus perfiles de Facebook y Twitter, Whatsapp o por correo electrónico. Luego de descargarlo la primera vez, ya no necesitarás acceso a internet para leerlo desde la aplicación.

5-     También podrás poner un Bookmark en alguna página del libro, de este modo quedarán señaladas las páginas que consideres interesantes durante tu lectura o señalarás la última página que leíste, así si quieres hacer un receso empezarás nuevamente desde esta página.

6-     Igualmente, dentro de los informes de Memoriapp podrás seleccionar frases que consideres pertinentes o importantes para recordar, y así tener siempre en el radar cifras, nombres, estadísticas o testimonios que hagan más comprensible la lectura de uno de nuestras investigaciones.

7-     Estos fragmentos seleccionados también podrás agregarlos como favoritos, para acceder a ellos de una manera más sencilla desde el menú principal de la aplicación. Para utilizarlo debes seleccionar la palabra o frase de tu interés y posteriormente presionar el ícono con la estrella en el menú que se abre en la parte superior del texto seleccionado.

8-     Memoriapp también cuenta con un diccionario para consultar las palabras o expresiones que te generen dudas. Para utilizarlo debes seleccionar la palabra y luego presionar en el logo de diccionario (al lado de favorito) que aparece arriba de la palabra escogida.

Sigue estos sencillos pasos y podrás usar Memoriapp, una aplicación que poco a poco estaremos actualizando con nuevos informes, más contenido y más opciones para navegar y conocer la memoria del conflicto armado en Colombia.

 


CNMH, Memoria, Memoriapp

El CNMH presenta el documental “Voces de agua y de tierra”

Noticia

Autor

CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

25 May 2016


El CNMH presenta el documental “Voces de agua y de tierra”

En el Tercer Festival Internacional de Cine por los Derechos Humanos que se realizará en Bogotá, Medellín y Cartagena, entre el 24 y el 28 de mayo, el CNMH presentará el largometraje: “Voces de agua y de tierra: desde las memorias de los campesinos de la región Caribe”.


Los recuerdos evocados en esta producción posibilitan a los espectadores acercarse a la realidad actual del campesinado colombiano, recreando momentos importantes de lo que se conoce en Colombia como la Lucha por la tierra y los múltiples procesos de victimización que han tenido que enfrentar. Los testimonios compartidos por ellos también permiten construir una opinión de lo que ha sido el proceso de organización campesina en Colombia, desde los años 70 hasta el presente.  En este  recorrido por el pasado, la música se convierte en un hilo que teje entre otras cosas, las vivencias de hombres y mujeres habitantes de la tierra y del agua.

Realizado de forma colectiva, este trabajo involucró a campesinos y campesinas de la región caribe, investigadores del CNMH e investigadores de música tradicional. El largometraje se enmarca dentro del proceso de investigación “Aportes metodológicos para la caracterización del sujeto y el daño colectivo con población campesina en la región caribe desde la perspectiva de memoria histórica”. Este esfuerzo conjunto se originó en la solicitud hecha (en 2012) por líderes campesinos de la región caribe al CNMH, cuyo propósito central era el de aportar elementos que, desde la memoria histórica, permitieran caracterizar el sujeto y el daño colectivo al campesinado.

A partir de esta petición, el proceso participativo se ha venido desarrollando en distintas fases de forma discontinua, desde 2013 hasta la fecha. La proyección se realizará el próximo 26 de mayo de forma simultánea en dos lugares distintos del país: El Carmen de Bolívar, Bolívar, y en las instalaciones de la Universidad Jorge Tadeo Lozano de Bogotá. Al finalizar la proyección del documental se realizará un conversatorio con tres de sus protagonistas y los realizadores. 

Proyección:

  • Titulo: Voces de Agua y de Tierra: desde las memorias de los campesinos de la región caribe. 
  • Fecha: 26 de mayo de 2016. 
  • Duración: 85´
  • Hora: 3:00 – 5:00 p.m.
  • Lugar: Hemiciclo – Universidad Jorge Tadeo Lozano. Carrera 4 # 22-61 (Bogotá).
  • Departamento de Bolívar. Municipio de El Carmen de Bolívar. Lugar por definir.

ENTRADA LIBRE HASTA COMPLETAR AFORO

 


Agua, CNMH, Documental, tierra, Voces

17 años de atentado con casa bomba en Neiva

Familiares de las víctimas mortales del atentado participaron del homenaje a sus seres queridos. La Policía develó la escultura “Edificadores de Paz”

Autor

CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

14 Feb 2020


17 años de atentado con casa bomba en Neiva

El Centro Nacional de Memoria Histórica acompañó a las víctimas de la explosión de una casa bomba en Neiva, en el homenaje que se les rindió por el atentado perpetrado el 14 de febrero de 2003.

La detonación en el perímetro del aeropuerto Benito Salas, de la capital del Huila, atribuida a la guerrilla de las Farc, provocó la muerte de 15 personas y dejó 66 más heridas.


La detonación de 200 kilos de explosivos sacudió las casas del barrio Villa Magdalena y la madrugada del norte Neiva. El estallido, a las 5:25 a.m., acabó con la vida de la fiscal especializada Cecilia Giraldo Saavedra, nueve policías y cinco civiles. Los vecinos del sector, cercano a la cabecera del aeropuerto Benito Salas, recuerdan imágenes de horror de cuerpos desmembrados y escombros del amanecer del 14 de febrero de 2003.

Otras 66 personas, en su mayoría habitantes del sector, sufrieron heridas graves por la explosión, que afectó sesenta casas alrededor de aquella en la que se escondía la bomba. El atentado fue atribuido a miembros de la columna móvil Teófilo Forero, de la guerrilla de las Farc.

Ante información de que se planeaba un atentado contra una visita presidencial programada justo ese día, las autoridades ordenaron allanamientos en varias casas, diligencias que estaban en ejecución en el momento de la detonación.

Un año después, un fiscal de la Unidad Nacional de Derechos Humanos profirió una resolución de acusación en contra de ocho miembros de la columna móvil Teófilo Forero de las Farc, sindicados por estos hechos. Según el testimonio de Wilson Díaz Ramos, alias “Bladimir”, desmovilizado de la guerrilla, los responsables del atentado fueron fusilados, señalados de haber filtrado información sobre sus planes.

El Centro Nacional de Memoria Histórica acompañó a las víctimas del atentado, en el homenaje que se rindió este 14 de febrero por sus vidas, en conmemoración de estos hechos que marcaron a la comunidad de la capital del Huila.



CNMH, Darío Acevedo Carmona, Memoria, Museo

Comunicado

Autor

CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

13 Feb 2020


Comunicado

  • 36 personas muertas y 198 heridas dejó el carro bomba detonado en el parqueadero del edificio, en el norte de Bogotá, el 7 de febrero de 2003.
  • Los encargados de ubicar los explosivos también murieron en los hechos, siguiendo órdenes de las Farc.

Como lo informamos desde principio de 2020 en nuestro portal web, iniciamos, a finales del año pasado, un proceso de renovación del sitio www.centrodememoriahistorica.gov.co que implicaba algunas intermitencias y dificultades temporales en descargas y consultas de informes en parte de los contenidos.

En el banner explicativo, que estuvo ubicado en la parte superior de la web, se ofrecieron disculpas a los usuarios y se dispuso el correo electrónico bibliomemoria@cnmh.gov.co para enviarles a los interesados la información que no se encontrara en el sitio.

Es de aclarar que la actualización emprendida responde a la intención de contar con una página más amable, útil y moderna para los usuarios, servidores públicos y contratistas, que nos permita prestar un mejor servicio al ciudadano. Las publicaciones, contenidos y demás productos de interés construidos desde el año 2008 continuarán estando al alcance de todos y todas.

Esperamos que en las próximas horas se tenga al aire el total de los informes y otros contenidos históricos del CNMH, mientras tanto, con el ánimo de evitar mayores molestias en los usuarios, en este enlace se podrán descargar las publicaciones del CNMH, incluyendo las revistas Conmemora. https://we.tl/t-gksByHSyje

Responderemos a cualquier inquietud adicional en el correo comunicaciones@cnmh.gov.co



CNMH, Darío Acevedo Carmona, Memoria, Museo

Foto montaje edificio El Nogal

Hace 17 años el horror tocó a El Nogal

Autor

CNMH

Fotografía

CNMH

Publicado

7 Feb 2020


Hace 17 años el horror tocó a El Nogal

  • 36 personas muertas y 198 heridas dejó el carro bomba detonado en el parqueadero del edificio, en el norte de Bogotá, el 7 de febrero de 2003.
  • Los encargados de ubicar los explosivos también murieron en los hechos, siguiendo órdenes de las Farc.

También era viernes. Frío, congestión en el tráfico, afanes… lo de siempre. Hasta que el horror tocó esa noche bogotana del 7 de febrero de 2003. A las 8:15 p.m., la detonación de una bomba de 200 kilos de anfo y clorato de potasio en el parqueadero del club El Nogal, en el norte de la capital, destruyó buena parte de la fachada y abrió un cráter del tercer al séptimo piso. En aquella tragedia ocurrida hace 17 años murieron 36 personas y otras 198 resultaron heridas. Quienes sobrevivieron llevan marcas, algunas más difíciles de sanar que las del cuerpo.

Un desespero inusual sacó a *César Páez —bogotano, diseñador de muebles— de una reunión con unos clientes y lo llevó a encontrarse con su esposa en el club.

“De pronto me empezó un escozor, unas ganas de irme. Y yo no tenía carro porque era pico y placa precisamente. Y hubo un momento que les dije a los clientes: qué pena con ustedes pero me tengo que ir, yo me voy”, recuerda.

Llegó al club, donde lo esperaba Catalina —arquitecta barranquillera, esposa y socia del negocio familiar—. Fue la última vez que la vio con vida. Le tenía agarrada la mano cuando explotó la bomba.

“Yo quedé un rato inconsciente. Y cuando desperté, estaba metido entre dos columnas de concreto; casi me voy al hueco del piso. Y las llamas salían de abajo”. Recuerdos que no se borran, aunque pase el tiempo.

“Para mí significa cortarme las alas a ras para nunca más volver a volar, porque con ella tenía una relación muy especial. Era una mujer muy hermosa, por fuera y por dentro. Muy amable, generosa con la gente que no tenía nada. Realmente es una pérdida muy grande”.

Según la Fiscalía, el atentado terrorista fue planeado por Herminsul Arellán, miembro de la columna móvil Teófilo Forero de las Farc. La intención era derribar el edificio entero, puesto que habían determinado que en el club se reunían altos funcionarios del Estado en medio de una difícil situación de orden público que atravesaba el país. Sin embargo, en los hechos también murieron Oswaldo y John Freddy Arellán —su hermano y su sobrino— a quienes habían encargado poner los explosivos, ocultos en el carro que manejaba el primero.

*Los nombres de los protagonistas de esta historia fueron cambiados por motivos de seguridad.



CNMH, Darío Acevedo Carmona, Memoria, Museo

Palabras del director del CNMH, Darío Acevedo, sobre primera piedra del Museo de Memoria de Colombia

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CNMH

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CNMH

Publicado

6 Feb 2020


Editorial

Palabras del director del CNMH, Darío Acevedo, sobre primera piedra del Museo de Memoria de Colombia

  • 640 grupos de investigación de todo el país podrán participar de la convocatoria del CNMH y Minciencias para proyectos sobre temas relativos al conflicto armado.
  • Cada proyecto de investigación contará hasta con 343 millones de pesos de financiación para su ejecución durante 18 meses.

El CNMH le comunica hoy al país, en este evento solemne presidido por el presidente de la República IVÁN DUQUE MÁRQUEZ, que da inicio a la construcción física del Museo de Memoria de Colombia en cumplimiento del mandato de la Ley de Víctimas 1448 de 2011 y e Decreto 4803 de 2011.

Con esta obra, el Estado colombiano dignifica, visibiliza y resguarda a las víctimas diversas y plurales del conflicto armado colombiano, para que la sociedad colombiana y el mundo nunca olvide los crímenes de guerra y de lesa humanidad que produjeron intenso dolor y sufrimiento a las comunidades y a la ciudadanía.

Para comprender con exactitud quienes estarán representados y quienes ocuparán un lugar en el Museo de Memoria conviene recordar el artículo tercero de la Ley de Víctimas que define la calidad de estas de la siguiente forma: “Se consideran víctimas, para los efectos de esta Ley, aquellas personas que individual o colectivamente hayan sufrido un daño por hechos ocurridos a partir del 1º de enero de 1985, como consecuencia de infracciones al Derecho Internacional Humanitario o de violaciones graves y manifiestas a las normas internacionales de Derechos Humanos, ocurridas con ocasión del conflicto armado interno”, definición a la que nos acogemos sin duda alguna.

Quiere ello decir que en el universo plural de las víctimas nos topamos con campesinos pobres y también con hacendados, con sindicalistas y también con empresarios, con maestros, con activistas políticos, con comunidades religiosas, con pueblos indígenas, afrodescendientes y rom, con habitantes de pueblos y municipios de la Colombia profunda, con líderes, partidos y movimientos políticos, con miembros de la comunidad LGBT, con defensores de derechos humanos y por supuesto con soldados y policías, todos ellos, en su correspondiente variedad de matices, colores, grados, clases, edades, sexos y creencias religiosas, porque todas ellas fueron objeto de heridas, privaciones, asaltos y daños en sus bienes y honra, en materia grave.

La construcción del Museo tiene dos componentes centrales a saber: de una parte, la Construcción Social y de otra, la Construcción física. La primera, diseñada y puesta en ejecución desde 2012 se refiere a la realización de talleres con las comunidades de víctimas, encuentros regionales y académicos y las itinerancias experimentales en varias ciudades. Además, en todas las actividades en las que se adelantan proyectos con las víctimas se recibe y se recopila objetos y textos de diversa índole para ser clasificados y analizados con miras a definir su lugar de exposición. Con estos materiales, documentos, ideas, narrativas, estadísticas, mapas, conceptos e insumos, unidos a nuevas experiencias, aportes y reflexiones, perfeccionaremos los lineamientos conceptuales y los guiones museológico y museográfico.

Visitantes nacionales y extranjeros tendrán la ocasión de formarse una opinión o visión sobre los graves hechos que victimizaron a millones de colombianos que huían de los enfrentamientos armados, que fueron expulsados a la fuerza de sus territorios, que sufrieron despojo, que perdieron a padres, madres, hijos y otros familiares, que fueron abusados sexualmente, reclutados siendo menores de edad, que sufrieron violaciones en sus rituales y costumbres, que fueron perseguidos por sus ideas o su militancia o por su misión constitucional e institucional.

El CNMH ha visitado decenas de comunidades a la largo y ancho del país e incluso en el exterior, para recuperar, preservar, visibilizar, dignificar y divulgar, las narraciones de las víctimas, pero también ha realizado acciones de reparación simbólica dando cuenta de sus procesos de recuperación emocional, espiritual y moral a través de los cuales las víctimas han demostrado al mundo y al país que hay caminos de superación que no implican llamados a la venganza creando ambientes de paz y convivencia y reconciliación. El pueblo colombiano y las víctimas de fenómenos de violencia política de reciente ocurrencia ha demostrado una inmensa capacidad de perdonar a los victimarios que con sinceridad piden perdón.

La construcción física es la que hoy nos tiene reunidos. El CNMH, fiel al mandato de la Ley, dará al servicio esta obra en dos años como testimonio perenne del compromiso del Estado colombiano desde el que se convoca a los colombianos a no olvidar, desde donde pretendemos que las generaciones actuales y las venideras exijan a los victimarios refrendar con firmeza su compromiso de no repetición, de que nada excusa la inhumanidad de sus acciones y a que entiendan que la generosidad de la democracia y la magnanimidad de la ciudadanía no es incondicional.

Permítanme reiterar el criterio con el que vengo trabajando con el equipo de directores de áreas, líderes de grupos de trabajo, investigadores y personal administrativo, según el cual el conflicto armado no es asimilable a la tragedia del pueblo judío perseguido con ánimos de exterminio por el régimen nazi, uno de los más criminales en la historia de la humanidad ni al régimen racista del apartheid de Suráfrica ni al terror estaliniano en la Unión Soviética ni a las detestables dictaduras sufridas por varios países latinoamericanos en las décadas pasadas. En nuestro caso tenemos una noción más o menos clara acerca de los hechos más terroríficos que se cometieron durante la confrontación: masacres, secuestros, asesinato de personas rendidas o civiles indefensos, uso de minas antipersonal, desapariciones forzadas, arrasamiento de pueblos humildes, de infraestructura social, torturas, y de quiénes fueron sus autores. En nuestro caso lo que nos distancia, a diferencia de otras situaciones, es que casi todo lo sabemos gracias a las investigaciones judiciales, a las crónicas de prensa, a la voz de las víctimas.

No es en el campo de lo ocurrido, de eso que los historiadores llamamos los acontecimientos, donde está el mayor de los problemas, aunque todavía hay sombras y hechos por aclarar. El acuerdo en estos tópicos no puede ir en detrimento de la interpretación fruto de investigaciones académicas que intentan construir hipótesis explicativas sobre todo lo ocurrido, para las cuales se precisa de información vasta y variada, tener en cuenta diversos fenómenos y cómo se entrecruzan, por ejemplo, el efecto altamente dañino y en gran medida estimulante del narcotráfico. Como bien lo dice el historiador británico colombianista reconocido Malcolm Deas:

“Los colombianos siempre han sido gente de diversos criterios y creencias. Nunca ha habido corrientes de opinión verdaderamente hegemónicas, ni “historia oficial” compartida. La imposibilidad de llegar a consensos sobre el pasado inmediato muestra eso, y no reconocerlo produce la confusión que se advierte en la polémica alrededor de la dirección del Centro de Memoria Histórica: el conflicto deja a los historiadores dos tareas, conexas pero distintas. Una es establecer el récord básico de qué pasó, trabajo necesario, y nada fácil, pero en el que cierto grado de acuerdo es posible. La otra es explicar por qué pasó, algo en extremo más difícil, y es vano pensar que en eso algún director o centro va a lograr imponer su autoridad.”

No quiero terminar sin referirme a criterios básicos que guiarán la vida del museo, criterios que habrán de signar el trabajo adelantado desde años atrás por nuestros equipos en el contacto con las víctimas y ser considerados en la elaboración definitiva de los guiones museológico y museográfico. En primer lugar, el museo debe reflejar el universo plural de las víctimas. En segundo lugar, el museo, en tanto entidad estatal, debe ser estricto en el cumplimiento del mandato legal de no producir ni tender a construir una verdad oficial del conflicto armado, ejercicio propio de dictaduras. En tercera instancia, el museo debe ofrecer una información amplia, precisa y rigurosa sobre las circunstancias de tiempo modo y lugar de los hechos victimizantes que se expondrán en sus salas. En cuarto lugar, el Museo debe tener una misión pedagógica clara y contundente de rechazo a la violencia política y de invitar a la reflexión sobre lo ocurrido durante el conflicto armado, sin la intención de incitar odios o venganzas y fomentar el respeto y el acatamiento de las instituciones democráticas, sin que se obvie la necesaria diferenciación entre víctimas y victimarios.

Queremos un museo en el que artistas nacionales y extranjeros nos honren con obras relativas a los hechos de violencia. En este sentido, el Museo de la Memoria será un espacio de representación que lo diferencia de los museos dedicados exclusivamente, con razones válidas, a registrar las atrocidades de un régimen político autoritario y liberticida.

Estimados amigos del Museo, hoy refrendamos ante el mundo y ante los colombianos la vigencia de nuestra democracia, nuestro deseo de paz, nuestro compromiso con la formación de las nuevas generaciones en la cultura del respeto y la tolerancia. El rescate de la memoria de las víctimas de crímenes horrendos no puede ser en vano porque se inspira en aquellos deseos profundos de recuperar los espacios de la vida tranquila, de la convivencia con seguridad, de respeto por las diferencias y de rechazo a la violencia. No hay, de parte del CNMH, ninguna duda, ninguna vacilación, ninguna incoherencia, ninguna debilidad en reconocer los hechos horrorosos que se cometieron afectando principalmente a la población civil. Queremos que la memoria perviva como vivencia propia de los seres humanos. Lo vivido y lo sufrido hacen y harán parte de nuestra existencia, pero, debemos aspirar a que esas narrativas del dolor y la resiliencia estén dirigidas a evitar que las comunidades y la ciudadanía sean sometidas de nuevo al sufrimiento.
No puedo terminar estas palabras sin dejar sentada nuestra gratitud y nuestro reconocimiento a todos los funcionarios y contratistas que desde el origen del CNMH han hecho posible haber llegado a este punto del proceso. Gratitud y reconocimiento que extiendo al señor Presidente Duque y a la doctora Susana Correa por su generoso apoyo y su respaldo para conmigo y para el equipo que me ha acompañado con denuedo, sin descanso y con gran vocación de servicio en este año de gestión. Gracias al Distrito Capital de Bogotá, a la empresa Bavaria por habernos facilitado este predio para la construcción del Museo, y en fin, a todas las entidades y organismos nacionales e internacionales, al cuerpo diplomático, por su solidario acompañamiento.

Convoco a todos ustedes a elevar un clamor unánime para que cesen los hechos criminales que han aumentado el dolor de las comunidades y familias colombianas, y a exigir a los violentos que cesen la matanza de líderes sociales, de las gentes indefensas, de soldados y de policías. No queremos más víctimas.

Darío Acevedo Carmona
Director General del CNMH
Bogotá D.C. febrero 5 de 2020



CNMH, Darío Acevedo Carmona, Memoria, Museo

CNMH y Minciencias abren convocatoria para democratizar la construcción de memoria

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CNMH

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CNMH

Publicado

6 Feb 2020


CNMH y Minciencias abren convocatoria para democratizar la construcción de memoria

  • 640 grupos de investigación de todo el país podrán participar de la convocatoria del CNMH y Minciencias para proyectos sobre temas relativos al conflicto armado.
  • Cada proyecto de investigación contará hasta con 343 millones de pesos de financiación para su ejecución durante 18 meses.

La construcción académica de memoria del conflicto armado será un proceso público gracias al convenio entre el Centro Nacional de Memoria Histórica (CNMH) y el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación para seleccionar 15 proyectos de investigación que recibirán financiación hasta por 343 millones de pesos.

En la convocatoria “Hacia una mayor comprensión del conflicto armado, las víctimas y la historia reciente del conflicto”, del CNMH y Minciencias, que estará abierta desde el 6 de febrero hasta el 6 de abril de este año, podrán participar 640 grupos de investigación de todo el país que trabajen en temas relacionados con la memoria histórica y el conflicto.

La iniciativa contará con 5.868 millones de pesos, aportados por el CNMH, y el proceso de evaluación y selección estará a cargo de Minciencias.

El director general del Centro Nacional de Memoria Histórica, Darío Acevedo Carmona, destaca que con esta iniciativa se abre una ruta para la pluralidad en el trabajo investigativo alrededor del conflicto armado en el país.

“El conocimiento sobre la memoria histórica de las víctimas del conflicto armado y el propio conflicto tiene que llegar a todas las regiones del país, consultar a la gente que ha investigado y no dejar eso en las propias manos del Centro de Memoria Histórica”, comentó.

La apertura de las inscripciones para esta convocatoria hace tangible una de las premisas básicas de la actual administración del CNMH: “La memoria la construimos todos y todas”.

El anuncio final de los elegidos se hará el 17 de junio. Los grupos de investigación que obtengan los mayores puntajes en el proceso de evaluación contarán con financiación por 18 meses para su trabajo académico.

Podrán participar de la convocatoria los grupos de investigación adscritos a Minciencias, en el área de Ciencias Sociales o Humanas en las categorías A o A1, en asociación con grupos de las categorías B o C o aquellos reconocidos por el Ministerio en todo el país.

“Le damos más legitimidad a los conocimientos en la medida en que en el esclarecimiento de los problemas nacionales intervengan grupos calificados por entidades respetables, que tienen autoridad en la materia”, agregó el director del CNMH. 

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